El General Pedro Bonilla Muñoz, jefe de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) admitió ante un juez que el expresidente Enrique Peña Nieto adquirió el malware Pegasus para espiar al menos 15 mil teléfonos.
Como parte del juicio que lleva la Fiscalía General de la República (FGR) para esclarecer el espionaje en contra de la periodista Carmen Aristegui, el General Bonilla compareció ante el juez Luis Benítez Alcantara.
Ahí, el mando castrense reconoció que el gobierno peñista espió a periodistas, empresarios y personas defensoras de los derechos humanos mediante el programa Pegasus.
Dicho malware se adquirió entre junio de 2011 y agosto de 2013. Y pese a dar a conocer esta información, el general desconoció si este convenio se realizó con algún área en particular del Ejército.
Sin embargo, acotó que su confirmación coincide con un comunicado de la Sedena de 2022 en el que la dependencia señaló que Pegasus fue utilizado para “seguridad” y operaciones internas.
El uso de Pegasus es uno de los grandes escándalos del sexenio de Enrique Peña Nieto. Pues según la investigación “Pegasus Project“, el gobierno peñista utilizó Pegasus para espiar más de 15 mil teléfonos.
Entre estos están los de figuras como la periodista Carmen Aristegui, los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Azman Ahmed, periodista del New York Times y algunos cercanos al hoy Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por supuesto que el gobierno peñista negó haber hecho la compra del software de espionaje. Empero, la FGR lleva a cabo un juicio para esclarecer este caso en contra de Juan Carlos García Rivera, un empleado del Grupo KBH señalado de perpetrar la intervención contra Carmen Aristegui.
Además de Carmen Aristegui y los ya mencionados, Peña Nieto ordenó espiar a Carlos Slim, Germán Larrea, Jenaro Villamil, Carlos Loret de Mola, entre otros. Así lo reveló Zeus, el testigo protegido que formó parte del arranque del juicio oral contra Juan Carlos García Rivera, acusado de operar el software espía Pegasus para KBH, una red de empresas fantasma que se usó para comercializar en México el programa propiedad de la empresa israelí NSO Group.
Cabe mencionar que en la compra de Pegasus no solo está involucrado Peña Nieto; según Proceso, es posible que Felipe Calderón haya acudido personalmente a una demostración de este programa, realizada por el empresario tapatío de origen japonés, José Susumo Azano Mantsura.
Además, Tomás Zerón, acusado de tortura y escondido en la región de Palestina ocupada por Israel, fue uno de los compradores del programa.
Por lo que la FGR lo investiga por los delitos de peculado, fraude equiparado, uso indebido de atribuciones y facultades y asociación delictuosa.