Andrés Manuel López Obrador tiene una singular manera de provocar un odio terrible entre sus adversarios. Él lo sabe, y juega con eso.
No sólo son frases que menciona, o ideas que explica en sus mañaneras, sino que también son acciones. Unas muy pequeñas, pero que provocan verdadera ira entre quienes lo odian.
Ayer lo volvió a hacer.
A eso de las ocho de la noche, cuando la vorágine informativa del día decae, AMLO difundió en sus redes sociales una foto de él mientras Álvaro Cárdenas, su peluquero de año, le corta el pelo. Acompañó la imagen de un mensaje corto y simple: “Sólo Álvaro Cárdenas, mi peluquero de años, me toma el pelo”.
La imagen pronto se viralizó. En Facebook (once horas después de difundida) tiene más de 400 mil reacciones, se ha compartido 34 mil veces y tiene 26 mil comentarios. En Twitter tiene 23 mil me gustas.
Solo Álvaro Cárdenas, mi peluquero de años, me toma el pelo. pic.twitter.com/R4srqrO31D
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) August 18, 2021
Las reacciones fueron muchas, la mayoría positivas, pero sus odiadores se pusieron enojadísimos, por ejemplo, Javier Lozano, que compartió el tuit con el siguiente mensaje: “¡Maldita frivolidad! Esto es demencial, inaceptable, ridículo, obsceno. Qué asco”.
https://twitter.com/JLozanoA/status/1427821549348864005
Y así, muchos anti-AMLO reaccionaron de esa manera. Y es que Andrés Manuel López Obrador tiene una singular capacidad para hacerlos enojar, y lo hace constantemente. ¿Por qué sacó dicha foto ahora, y por qué quería hacerlos enojar de esa manera, y cuál era precisamente el mensaje? Eso requeriría otro análisis. Lo cierto es que AMLO juega con los de la oposición. Se ríe de ellos. Y ellos, cosas de la vida, siempre caen. Redonditos.