Gracias a los programas sociales Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro que la 4T envió a El Salvador y Honduras, se han logrado reducir las intenciones de migrar entre sus beneficiarios, según reveló el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En su informe “Nuestras voces, desde abajo: Diagnóstico sobre los resultados de los proyectos Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro en sus beneficiarios en El Salvador y Honduras”, el PNUD habría expuesto evidencias sobre este planteamiento.
Programa Sembrando Vida
Al evaluar el programa Sembrando Vida, el PNUD encontró que:
“Aproximadamente el 80% de los beneficiarios de ambos países no migró antes de su participación en el proyecto; sin embargo, de este conjunto, el 24% en El Salvador y 33% en Honduras reportan haberlo considerado. Después del programa, estas cifras disminuyeron a un 2% y 4% respectivamente”.
El cambio en las intenciones de migrar presenta una disminución porcentual de 91% en El Salvador y de 87% en Honduras.
El documento expone que los beneficiarios que habían migrando antes de formar parte del programa, o lo habían considerado, indicaron que sus intenciones migratorias se debían principalmente a:
- Falta de oportunidades laborales y productivas
- Delincuencia
- Inseguridad
“Ellos reportan que, gracias a los aumentos en los niveles de producción y la diversificación de cultivos, actualmente pueden consumir más y comercializar más, asegurando más alimentos para sus familias y mayores ingresos derivados de las ventas”, menciona el PNUD.
Jóvenes Construyendo el Futuro
También los participantes de esta estrategia mostraron una disminución de sus intenciones de salir de sus comunidades para migrar hacia otros países, según el estudio antes mencionado.
“Antes de participar en Jóvenes Construyendo el Futuro solo el 4% de las y los jóvenes en El Salvador y 8.8% en Honduras había migrado a otro país. Más de la mitad de ellos migró a Estados Unidos. Los jóvenes de El Salvador solamente migraron a este país o a otro país centroamericano. En contraste, algunos de Honduras migraron a México o a algún país europeo”, indica.
Antes de participar en Jóvenes Construyendo el Futuro, casi la mitad de los jóvenes que no habían migrado lo había considerado (46.9% en El Salvador y 54.8% en Honduras), pero una vez que formaron parte del programa, se redujo a 37.7% en El Salvador y 28% en Honduras.
Así, se obtuvo una reducción porcentual de 19.6% en El Salvador y 48.9% en Honduras en las intenciones de migrar.
El PNDU explica que:
“Es claro que el programa tiene resultados positivos para reducir las intenciones de migración, pero también puede deberse a otros factores contextuales, como un mayor miedo de migrar, tener mejores condiciones en el país de origen o modificaciones en las preferencias de los jóvenes”.
Sobre quienes aún tienen intenciones de migrar, en ambos países, sus principales motivos son: la necesidad de mayores ingresos y la falta de trabajo en sus respectivos países.
Colaboración con Estados Unidos
Estos datos respaldan la propuesta que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha hecho al Gobierno de Estados Unidos para colaborar en el financiamiento de estos programas en Centroamérica, para mejorar las condiciones de vida en la región y, así, disminuir el flujo migratorio de personas hacia dicha nación.
En mayo pasado, durante su reunión en el Salvador con su homólogo Nayib Armando Bukele Ortez, AMLO llamó al Gobierno d Estados Unidos a involucrarse en la solución de la pobreza la desigualdad, el desempleo y la marginación en Centroamérica.
“He insistido en que tales soluciones demandan el esfuerzo conjunto de los tres países de esta región, además de México y de Estados Unidos, que es, por donde quiera que verse, Estados Unidos protagonista del fenómeno migratorio, y debe, en consecuencia ser corresponsable en darle solución, modificando sus políticas migratorias y ayudando a combatir las condiciones que obligan a millones a abandonar sus lugares de residencia”, indicó el mandatario mexicano.