El primer Gobierno del mundo en comprar Pegasus fue el de Felipe Calderón mediante la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el 2011. Según un reportaje de la revista Proceso, firmado por el periodista Mathieu Tourliere, el ex mandatario se quejó abiertamente con ese medio de comunicación del uso punitivo que se le ha dado al sistema para espiar a personajes de toda índole, desde políticos, activistas, periodistas y personas incómodos.
“Aunque no me sorprende, me sigue pareciendo una injustificable violación a los derechos más elementos de libertad y privacidad (…) es inaceptable en cualquier caso, un signo ominoso y opresivo que dibuja vocaciones dictatoriales y antidemocráticas”, dijo el ex presidente de México.
Uno de los funcionarios que se sirvió de este sistema es Genaro García Luna, quien fue brazo derecho de Calderón y encabezó la Secretaría de Seguridad Pública, desde donde armó un complejo sistema de espionaje, y al mismo tiempo fue un actor de la industria de las tecnologías de vigilancia de origen israelí, junto con su socio Mauricio Samuel Weinberg.
De acuerdo con Proceso, pocos días después de las elecciones del 5 de junio de 2016, un cliente mexicano del software Pegasus, desarrollado por la compañía israelí NSO Group, empresa líder en el mundo del ciberespionaje, puso en marcha el sistema de espionaje con los números telefónicos de Ricardo Anaya Cortés, del Partido Acción Nacional (PAN), y de Margarita Zavala, esposa del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa. Los dos se disputaban la candidatura del PAN rumbo a la Presidencia de la República en el 2018.
Sin embargo, añade, Zavala no fue la única blanco de espionaje, pues su hermano Juan Ignacio Zavala Gómez del Campo y su sobrina Mariana Gómez del Campo también fueron ingresados a la plataforma Pegasus, mientras que Luisa María Calderón, hermana del ex mandatario, fue espiada a principios de 2017.
La revista Proceso también señala que meses después, la agencia seleccionó el número de su asistente Jorge Camacho Peñaloza y de Daniel Vázquez García, quienes posteriormente jugarían un papel en la campaña de Zavala.
Proceso menciona que el Gobierno de Peña Nieto también espió a algunos militantes de su propio partido, como los legisladores Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón, quienes eran líderes priistas del Senado y de la Cámara de Diputados, respectivamente. Asimismo, la excanciller Claudia Ruiz Massieu y Alejandro Moreno, fueron blancos del espionaje.
Además, reporta que el Gobierno de Peña Nieto desplegó enormes recursos para espiar al actual Presidente Andrés Manuel López Obrador, a su esposa, a sus tres hijos, tres hermanos, amigos íntimos y a decenas de sus colaboradores más cercanos, durante la época en que el tabasqueño y su partido Morena estaban en pleno ascenso hacia la Presidencia de la República.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo esta mañana que ya no hay espionaje en México y que si existe algún contrato con NSO, la empresa israelita que generó el software Pegasus, “hay que cancelarlo”.