Si la reputación de los panistas que a nivel nacional acompañan a Xóchitl Gálvez Ruiz en su aspiración por la Presidencia de la República no es la más deseada, en las entidades locales tampoco se quedan abajo. En su segundo día de actividades por el municipio de Zapopan, Jalisco, uno de los tres más ricos a nivel nacional y tradicional bastión del panismo tapatío, la ex senadora se exhibió públicamente con dos de los ex gobernadores de Acción Nacional, responsables de un estancamiento económico, social y cultural en Jalisco; Francisco Ramírez Acuña y Emilio González Márquez.
El primero, actual aspirante al Senado, marcó su sexenio (2001-2006) con el sello de la tortura, abusos y violaciones constantes a los derechos humanos, un golpeador en toda la extensión de la palabra.
Del segundo, se pueden decir bastantes cosas, pero nada mejor sintetiza su trayectoria política como aquellas frases que pronunció públicamente durante un evento público en el 2008 cuando se encontraba en visible estado de ebriedad en compañía del cardenal emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez: “chinguen a su madre” y “me vale madre”.
Vocación represora
Su autodefinición, un demócrata de “mano firme” no deja lugar a dudas de su vocación represora, como forma habitual para resolver los problemas de gobernabilidad.
Francisco Ramírez Acuña es el responsable de haber destapado las aspiraciones presidenciales de Felipe Calderón el 29 de mayo del 2004 en el rancho Las Palmas, propiedad de Abraham González Uyeda, uno de los principales productores de leche de la región, que vende bajo la marca Sello Rojo.
Un día antes, en pleno centro de Guadalajara, cientos de personas que protestaban de forma pacífica en el marco de la la tercera Cumbre América Latina, Caribe y Unión Europea, fueron duramente reprimidas.
El saldo fue de 120 personas detenidas y una veintena de policías heridos. Organizaciones civiles como la Coordinadora 28 de mayo o el Cepad, así como la Comisión Nacional de Derechos Humanos, documentaron que casi medio centenar de los detenidos fueron sometidos a torturas y tratos crueles y una decena de personas encarcelada sin el debido proceso.
Durante su mandato, las denuncias por tortura aumentaron considerablemente al recibir la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco 640 quejas por ese delito.
En su segundo año de gobierno, un sábado 4 de mayo de 2002, Ramírez Acuña ordenó la irrupción de manera violenta de un festival de música electrónica que tuvo lugar en Tlajomulco de Zúñiga, municipio conurbado del área metropolitana de la ciudad de Guadalajara.
Más de 1500 ravers distribuidos en tres escenarios instalados en el Club Deportivo Oro, gozaban de los beats de DJs y productores nacionales e internacionales, cuando de forma repentina irrumpieron más de 200 elementos de distintas corporaciones policiacas ( PGR, policía estatal y municipal), equipados con armas y acompañados de perros sin bozal, sometieron al total de los asistentes, obligándolos a tirarse boca abajo para ser revisados uno por uno durante más de tres horas. Los tratos agresivos, humillantes, los golpes y el manoseo a varias de las asistentes, fueron la constante.
Horas después del operativo y con los detalles del abuso policial saliendo a la luz en los medios locales y nacionales, Francisco Ramírez Acuña, lejos de retractarse y de reconocer lo desproporcionado de la acción policiaca, se aventuró a hacer declaraciones cargadas de juicios morales.
“No vamos a permitir que se estén dando este tipo de reuniones de francachelas y orgías”.
En octubre de 2006 una publicación gubernamental con tiraje de cien mil ejemplares resaltó en un cintillo que “Los derechos humanos son para todos, menos para los delincuentes”. Más allá de la violación que esto implica de los tratados internacionales de derechos humanos, la queja versaba sobre el hecho de que los torturadores convertían a inocentes en delincuentes.
Ramírez Acuña ingresó al PAN en 1969 en donde ha permanecido toda su vida política. Sin embargo, debido a su impulsivo cáracter que lo ha llevado a enfrentamientos con los propios panistas ha tenido una militancia intermitente dentro de la institución política.
Ha sido diputado local en dos ocasiones, en la primera, que ganó por mayoría de votos en la década de los setenta, con apenas 21 años cumplidos, era el más joven de cuantos legisladores había en el país.
De Acuña solía decirse que era el panista más príista de la entidad, ya que su formación política ocurrió precisamente en su paso por el recinto legislativo donde predominaba el Revolucionario Institucional.
Con el arribo de Alberto Cárdenas Jiménez, el primer gobernador del PAN que tuvo Jalisco, Ramírez Acuña se convirtió en el director del Sistema de Transporte Colectivo de la Zona Metropolitana de Guadalajara (SISTECOZOME) con una gestión sumamente desastrosa.
Dejó el cargo en 1997 para competir por la alcaldía de Guadalajara en la elección intermedia de ese año. Obtuvo el triunfo y entró en funciones como alcalde de la capital jalisciense en 1998, pero no terminó la administración pues en el 2000 se lanzó como aspirante a la gubernatura de Jalisco. Volvió a ganar, sin embargo el pequeño margen de votos que logró frente a su competidor, el priísta Jorge Arana Arana, levantaron la sospecha de un presunto fraude.
A ojos vistos de la opinión pública, Ramírez Acuña ejerció el poder a la usanza de un cacique con mucha prepotencia e intolerancia a los cuestionamientos de la prensa y de periodistas que no le eran afines. Académicos y representantes de organizaciones civiles lo describen como un personaje sin carisma, nada popular, deslumbrado por el poder, el dinero y el estilo de vida de los acaudalados.
Durante su gestión la entidad sufrió importantes rezagos. En sus tres primeros años prácticamente no hizo obra pública importante. Fue en el segundo trienio de su administración que arrancó una serie de obras por todas partes, pero no terminó ninguna. Le dio prioridad a la construcción de puentes y pasos a desnivel en la ciudad para el uso de más automóviles, en detrimento del transporte colectivo como el Tren Eléctrico Urbano, que no creció ni un metro más, un hecho que en la actualidad tiene ahorcada a la Zona Metropolitana de Guadalajara en materia de movilidad.
Incluso existen acusaciones fuertes, hasta ahora no comprobadas, de que su fortuna la hizo al amparo del transporte público, posesionándose de algunas rutas importantes.
En su sexenio abundaron también las denuncias de corrupción y del mal uso de recursos públicos, tal como ilustra su intención de crear al fondo de la Barranca de Huentitán la Presa Arcediano, un megaproyecto frustrado al que le destinó más de 15 mil millones de pesos para llevar el agua contaminada del río Santiago hacia los hogares de la ciudad de Guadalajara.
A Ramírez Acuña se le criticaron también sus frecuentes viajes al extranjero pagados con dinero de los contribuyentes, de los cuales nunca rindió cuentas convincentes.
Otro episodio que revela su faceta caciquil, ocurrió cuando un ciudadano solicitó una copia de su recibo de pago de nómina y el ex mandatario se negó. El Instituto de Transparencia estatal intentó sancionarlo, pero Ramírez Acuña zanjó el tema con una declaración: “El gobernador del estado no tiene superior jerárquico”.
Como titular de la Secretaría de Gobernación, -una vez que Felipe Calderón asumió la Presidencia de la República y le dio el nombramiento- Ramírez Acuña censuró la transmisión de programas de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) argumentando que eran falsos, que representaban ataques a terceros y provocaban la perturbación del orden y la paz públicos.
Asimismo, durante la entrega del Primer Informe de Gobierno de Felipe Calderón, ocurrió una sospechosa caída de la transmisión, que impidió la difusión del mensaje de la diputada perredista Ruth Zavaleta.
Acuña aseveró de manera genérica: “Fue un problema de producción, todos ustedes (los reporteros) mejor que nadie los conocen”.
En otro escándalo por su falta de transparencia, Ramírez Acuña aceptó que la Segob canalizó recursos en favor de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) para celebrar la asamblea de la organización que agrupa a la jerarquía católica.
Dijo que se trataba de un “apoyo legal” inscrito en el presupuesto de egresos de esta dependencia, el cual “es un apoyo que se viene dando desde hace muchos años”.
Emilio González Márquez
Emilio González Márquez es actualmente el coordinador de campaña de Xóchitl Gálvez en Jalisco. Después de su nefando periodo como gobernador (2007-2013), pasó al destierro de la vida pública hasta que el dirigente del PAN, Marko Cortés, le dio el nombramiento de nuevo delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) para las elecciones de 2022 en Quintana Roo.
En mayo de 2015, candidatos a diputados locales y federales de Jalisco del PAN solicitaron la expulsión de González Márquez por apoyar en la contienda electoral a Enrique Alfaro Ramírez, entonces aspirante a la alcaldía de Guadalajara por el partido Movimiento Ciudadano (MC).
“La dirigencia municipal ha sido congruente el señor Emilio González se va del PAN por traicionar al partido y apoyar al señor Enrique Alfaro”, dijo en ese momento Juan Pablo Colín, exsecretario general del partido blanquiazul en Guadalajara.
El sexenio de González Márquez estuvo marcado por una gestión polémica por el endeudamiento de la entidad, el mal manejo de recursos, la violencia, corrupción y, además, por su también controvertida personalidad.
En 2004 ganó las elecciones para la alcaldía de Guadalajara. La deuda directa contratada por su administración pasó de 4 mil 440 millones de pesos en 2007 a 15 mil 676 millones de pesos en 2012, de acuerdo con los datos difundidos a partir de una nueva solicitud de crédito enviada al Congreso local.
La deuda pública total, la contraída por municipios, estado u organismos públicos con o sin aval y registrada ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), también se triplicó: pasó de ( mil 480 millones de pesos en 2007 a 26 mil 289 millones de pesos (210 por ciento más) a 2012.
González Márquez es recordado por haber dicho que las uniones entre parejas del mismo sexo le provocaban “asquito” y por decir que a él, le valen “madre” las opiniones y cuestionamientos de ciudadanos y medios de información sobre los millonarios donativos que hizo a la Iglesia católica con recursos del erario.
Su primer dislate ocurrió durante la inauguración de la segunda Cumbre Iberoamericana de la Familia, organizada por la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) el 9 de octubre de 2010, el panista causó polémica el decir que las uniones homosexuales le daban “asquito”.
El segundo hecho ocurrió el 24 de abril del 2008 durante una cena celebrada en Expo Guadalajara en la que el ex gobernador entregó 15 millones de pesos de recursos públicos a la Asociación Mexicana de Bancos de Alimentos (AMBA).
González Márquez hizo constantes alusiones al cardenal Juan Sandoval Íñiguez, ahí presente. “Éste es un cuete (borrachera). No me importa, me cae. Don Juan, absuélvame desde allá. Además estamos haciendo un buen desmadre, don Juan, ¿sí o no? Aquí hay un cheque, el 419240, cabrón, a nombre de la AMBA. Digan lo que quieran. Perdón, señor cardenal: ¡chinguen a su madre!”
“Déjenme decirles que yo estoy comprometido con este movimiento y que traigo aquí un pinche papelito (el cheque por 15 millones) que dice: ‘gobierno de Jalisco, Secretaría de Finanzas’. Óscar (García Manzano, titular de la dependencia), ¿dónde andas? ¡Hasta que, cabrón, hiciste algo bueno por Jalisco! Martín Hernández (secretario de Desarrollo Humano): felicidades, chingado, ya hacía falta”, agregó, micrófono en mano, durante el decimocuarto Banquete del hambre.
Y siguió: “(El dinero) no es mío, yo no lo tengo. Yo no tengo 15 millones de pesos, pero ¿saben qué? La gente votó por mí, la gente en su mayoría votó por que yo haga realidad a lo que me comprometí en campaña y me vale madre si a algunos periódicos no les gusta, la gente votó por mí y en ese votar por mí debe tener el compromiso que yo he asumido de apoyar a los que trabajan por que no haya hambre en nuestro estado”.
Ante la desesperación de su esposa, Imelda Guzmán, quien desde la primera fila le hacía señas de que se callara, el gobernador remató: “Yo estoy aquí para cumplir un compromiso ante mí mismo, ante mi conciencia, ante la conciencia de la gente que votó por mí y que dice: ‘No más hambre en Jalisco’. Este dinero no es mío. Yo no lo tengo. Todo lo que he trabajado en la vida es para dárselo a mis hijos, para procurarles una buena educación; es lo único que tengo. Éste es dinero del pueblo, pero el dinero del pueblo me ha sido confiado”.
En respuesta, en junio de 2012 cerca de cinco mil personas realizaron la “mentada de madre” más grande del mundo. Con este acto, impusieron en Jalisco un Récord Guinness e inaugurando la categoría de “mentada” al famoso libro.
El récord se logró después de que los habitantes superaran los 122 decibelios de ruido, al gritar al unísono “Emilio, chingas a tu madre”. El encuentro jalisciense se promovió en las redes sociales como forma de “despedida” al Gobernador.
Antonio
3 marzo, 2024 at 7:49 pm
!La basura se junta!, ¿cierto, Botijona?
René Arnulfo
3 marzo, 2024 at 8:32 pm
Xochitl “la Botarga” Gálvez, ya tiene también su oscuro pasado y negro presente.
luis
4 marzo, 2024 at 11:50 am
Ellos mismos se representan…como la corrupción… La hipocresía… Lo racista… Clasistas… Y rateros que son los del PRIAN… está es su historia y quieren repetirla en la presidencia… Pero no va ser… Ganaremos nuevamente la 4T…
Voto conjunto Presidenta Diputados y Senadores 4T
esther solano
4 marzo, 2024 at 8:38 pm
Un verdadero caos en lo que concierne a los gobernadores PANISTAS , que mintieron al ofrecer un verdadero cambio de gobierno resultaron peor que los PRIISTAS cinicos que al menos ya conociamos como corruptos y cinicos pero estos PANISTAS se mofaron del pueblo de Jalisco con la mascara y sin dejar a un lado su cadena y su crucifijo. Gran decepcion. Ni el BEBETO ni el borracho de Emilio Glz Marquez ni Acuña , dieron buenas cuentas a los jalisciences.