Antes de irse, el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue, dejó en el misterio el patrimonio que acumuló durante sus ocho años de gestión.
Según indica el medio de comunicación Froji.mx, como funcionario, el hoy ex rector de la UNAM estuvo obligado a presentar su declaración patrimonial, en la que detalle sus ingresos, bienes, adeudos, cuentas bancarias y su participación en empresas.
No obstante, relata el periodista Rodrigo Gutiérrez, al solicitar a la UNAM la versión pública de cada una de las declaraciones patrimoniales de Graue, por no encontrarlas en la Plataforma Nacional de Transparencia, la institución indicó que fueron clasificadas como confidenciales.
“Transparencia” UNAM
La instancia que decidió clasificar como confidencial el patrimonio de Graue fue el Comité de Transparencia de la UNAM, indica el periodista.
Según el Comité, la decisión fue acatada como parte de una propuesta presentada por la Dirección General de Responsabilidad, Inconformidades, Quejas y Registro Patrimonial de la Universidad.
“Este Comité de Transparencia CONFIRMA la CLASIFICACIÓN de CONFIDENCIALIDAD TOTAL propuesta por la Dirección General de Responsabilidades, Inconformidades, Quejas y Registro Patrimonial, respecto de las declaraciones patrimonial y de intereses (de Enrique Graue)”, indica la resolución.
La propuesta fue realizada como respuesta a la solicitud de información emitida por Gutiérrez, bajo el argumento de que el rector ordenó que no se hiciera público el contenido de su patrimonio.
“(Enrique Graue) manifestó expresamente que no está de acuerdo en hacer pública la información contenida en dichas declaraciones”, menciona el documento.
La resolución añade que las declaraciones patrimoniales de Graue no solo contienen su patrimonio y datos personales, sino también de terceras personas, como su cónyuge y dependientes económicos, que es de carácter privado.
Ante dicha respuesta, Froji.mx explica que solicitó una versión pública de sus declaraciones, tapando los datos personales y de terceros, “como ocurre con la mayoría de las dependencias federales y locales, incluyendo autónomos, como es la UNAM”.
Pese a esto, la Universidad consideró que “proporcionar la información clasificada como confidencial, implica un riesgo o afectación para su titular (…), al no contar con su consentimiento, esta Universidad se encuentra jurídicamente impedida para proporcionarla”.
Apenas dos declaraciones públicas
En ocho años como rector de la UNAM, Graue sólo ha presentados dos declaraciones patrimoniales.
La primera, de seis hojas de extensión, cuenta con el número de expediente 012124, mientras que la segunda, de ocho hojas, tiene el número de expediente 015937.
Según el Reglamento de Responsabilidades Administrativas de los Funcionarios y Empleados de la UNAM, se debe presentar la declaración patrimonial cuando se inicia o finaliza un cargo, hay un cambio de entidad académica o dependencia administrativa, un posible conflicto de interés o modificación en el patrimonio que debe ser informada.
Esto significa que, a diferencia de otras entidades públicas, los trabajadores de la UNAM no están obligados a presentar su declaración patrimonial de forma anual.
Su sueldo
Enrique Graue debió presentar su última declaración patrimonial a más tardar 45 días después de dejar su cargo como rector, pero si decide tampoco hacerla pública será clasificada como confidencial.
Gutiérrez resalta que aún así es posible saber su sueldo como rector de la UNAM.
A decir del Portal de Transparencia Universitaria, Graue recibió un salario de 62 mil 922 pesos mensuales brutos y “compensación por antigüedad”, de 39 mil 514.80 pesos e “ingresos por salarios”, de 81 mil 794.20 pesos.
Así, indica, las percepciones salariales de Enrique Graue, únicamente por ser rector de la UNAM, fue de 187 mil 231 pesos al mes brutos.
Ismael Hernández
27 diciembre, 2023 at 5:39 pm
No debe extrañarnos, ha Sido uno de los peores rectores en la historia de la UNAM, tanto en lo académico como en la administrativo y en su relación con la comunidad estudiantil, como ya es sabido y es lo menos que se sabe es que desvío fondos del presupuesto de la UNAM a la fundacion Conde de Valenciana,la cual siempre ha presidido, y hora que no quiere hacer publica su declaracion, solo confirma las sospechas de los malos manejos financieros que hizo del presupuesto de la UNAM en 8 de rectoria, también se confirma porque designaron al actual rector como sucesor, ya vemos que fue para cuidarle las espaldas y encubrirlo de los malos manejos, pues no era uno es el mejor elemento para ese cargo, había por lo menos uno mejor e idóneo para los tiempos que vive México y el mundo. Pobre UNAM con esa junta de gobierno y sus órganos de corrompidos, no obstante a pesar de ellos sigue siendo la mejor de mexico y de habla hispana, . Nada más y por ultimo, los recursos de la UNAM son de procedencia publica y las leyes y reglamentos de la UNAM no están por encima de la Constitucion, y se le debería obligar por ley que se hiciera publica esa declaración, pero se escuda en lo corrupta que es la suprema corte de justicia y nunca le van a hacer nada son y pertenecen a lo mismo la corrupción herencia de los gobiernos anteriores
A pesar de todo Viva la UNAM!