Ante el anuncio de Andrés Manuel López Obrador de que el Seguro Popular dejará de existir por la gran cantidad de recursos que se han desviado, el secretario de Salud, José Narro Robles, reconoció que al menos 15 estados de la República extraviaron recursos de este sistema de salud pública, y por eso, la dependencia a su cargo ha interpuesto 70 denuncias de carácter penal ante la Procuraduría General de la República.
Se estima que la malversación de recursos durante el gobierno de Enrique Peña Nieto asciende a más de 6 mil millones de pesos, de acuerdo con información que ha recabado la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
La diputada de Morena, Carmen Medel Palma afirmó que desde el 2012 el presupuesto para el sector salud disminuyó alrededor de un 25 por ciento, lo que ha ocasionado que sus servicios sean insuficientes y de mala calidad.
“Se ha convertido (el Seguro Popular) en el botín perfecto para ser desviado”, dijo.
José Antonio Meade, titular de Sedesol, y Javier Duarte, gobernador del Estado, visitaron a niños con cancer realizan manualidades como parte de su tratamiento en la Asociación Civil Orizaba. Foto: Isaac Esquivel/Cuartoscuro
La legisladora tomó como ejemplo a los estados de Veracruz, Jalisco y Michoacán, donde se presentó de forma más dramática el desvío de recursos.
Los medios de comunicación dieron cuenta que en Veracruz, durante el gobierno de Javier Duarte, niños enfermos de cáncer recibieron agua destilada en lugar de las medicinas de sus quimioterapias.
En Jalisco, según el órgano fiscalizador, el desvío asciende a poco más de 3 mil millones de pesos, pero además existen inconsistencias como compra de medicinas a sobreprecio, falta de documentación en las licitaciones en compras, adjudicaciones directas y falta de comprobantes para sustentar los pagos.
Antonio Cruces Mada, ex secretario de Salud de Jalisco. Foto: Especial.
El domingo pasado, López Obrador argumentó que tomó la decisión de eliminar el Seguro Popular porque “ni es seguro ni es popular”; sin embargo apuntó que la atención de los servicios de salud se garantizará, de forma gratuita y con medicinas.
“Ya no va a haber Seguro Popular, porque eso ni es seguro ni es popular, va a haber medicina y atención médica gratuita, se va a garantizar lo que establece la Constitución en el Artículo 4: el derecho del pueblo a la salud”, argumentó López Obrador el fin de semana pasado, aunque no aclaró en qué hospitales se ofrecerá el servicio a los más de 20 millones de usuarios que quedarán “en el limbo”, dijo el mandatario electo.
Durante su comparecencia, el Secretario de Salud admitió que uno de los retos que enfrentará el gobierno de Andrés Manuel será el uso eficiente de recursos en el sistema.
“No se vale desviar recursos públicos, pero hacerlo en salud es un doble delito”, expuso Narro Robles.
El Hospital Civil de Guadalajara, uno de los nosocomios más recurrido por usuarios del Seguro Popular. Foto: Especial.
De acuerdo con el estudio “Gasto en salud per cápita”, del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), que contiene datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), el Seguro Popular da cobertura a la mitad de usuarios de instituciones o programas de salud en el país.
Hasta el año 2016, 20 millones 468 mil 109 personas estaban registradas como derechohabientes de este programa en el sistema de salud federal, el cual concentra a poco más de 40.88 millones de usuarios.
Con esas cifras, el Seguro Popular rebasa por sí solo, a la totalidad de personas que atienden cuatro instituciones: el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS, con 16 millones 074 mil 447 afiliados), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE, con 2 millones 598 mil 117), el servicio de Petróleos Mexicanos (Pemex, 773 mil 189) y los beneficiarios del IMSS-Prospera (996 mil 124).
