El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador está armando un plan para promover la generación de energía solar respaldada por el Estado, el cual consistiría en inversiones de más de mil millones de dólares y beneficiaría a comunidades locales, además de ayudar a cumplir los objetivos ambientales.
El Director General del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons, aseguró que el esquema busca ir más allá del uso planeado de la energía solar para el proyecto ferroviario Tren Maya, el cual unirá ciudades en la Península de Yucatán.
Este esquema se llevaría a cabo mediante la Comisión Federal de Electricidad (CFE), recibiría su financiamiento principalmente de los bancos estatales de desarrollo y las ganancias se reinsertarían en las comunidades locales, explicó Jiménez Pons.
“Es un ganar ganar (…) este proyecto podría abrir una brecha de acciones, no solamente en Fonatur, sino en otras dependencias del Estado, la misma Secretaría de Comunicaciones y Transportes ya puede hacerlo bajo ese mismo esquema (…) en todos los aeropuertos de México”, dijo el funcionario a Reuters.
Agregó que este programa tendrá potencial para agregar miles de megavatios (MV) de capacidad solar, aunque, admitió, que sería una “maravilla” -aunque poco probable- que Fonatur pudiera alcanzar los mil MW antes de que termine el Gobierno actual.
Para reforzar el control estatal sobre el mercado energético, el Gobierno de AMLO ha estructurado una política que beneficie a Pemex y la CFE, un gran consumidor del petróleo que produce la paraestatal.
Según el Gobierno, las empresas estatales generan suministros de energía más confiables que las fuentes renovables, causando grandes desacuerdos con proveedores independientes.
Para garantizar el suministro y su continuidad, el plan de energía solar de Fonatur apunta a usar baterías que almacenen energía.
A decir de Jiménez Pons, el desembolso adicional sería de unos 1.8 millones de dólares por MW instalado, lo que significa que el esquema podría generar una inversión de hasta mil 800 millones de dólares o más.
Fonatur, que sería responsable de encontrar el 20 por ciento de los fondos, enfatizó que el plan era un esfuerzo de colaboración gubernamental y que, aún si la dependencia consiguiera fondos privados, todo estaría bajo control estatal.
Si el Gobierno autoriza el proyecto, el parque solar para el aeropuerto de Cancún se comenzará a construir en noviembre y podría concretarse en seis meses o menos.
También los aeropuertos de Campeche, Chetumal y Mérida, en la Península de Yucatán, son candidatos potenciales a este proyecto.
Finalmente Jiménez Pons indicó que, este 2021 Fonatur también quiere lanzar granjas solares cerca de Los Cabos y de las playas de Cozumel y Tulum.