El general Luis Rodríguez Bucio será quien presida la Guardia Nacional. Así lo anunció hoy Alfonso Durazo, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, en la conferencia mañanera del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Rodríguez Bucio nació en Tancítaro, Michoacán, en 1956. Es licenciado en Administración Militar, en el Colegio de la Defensa Nacional. Posee una maestría en Seguridad Nacional y un doctorado en Seguridad y Defensa nacional. Estaba en proceso de jubilarse en el Ejército Mexicano.
El comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio, con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, en 2017.
Integrarán además la coordinación de la Guardia Nacional: por la Secretaría de la Defensa Nacional: General Xicotencatl Núñez Marquez; por la Secretaría de la Marina: Contraalmirante Gabriel García Chávez; y por la Policía Federal: Patricia Rosalinda Trujillo Mariel.
Andrés Manuel López Obrador indicó que lo que se busca es que parte de las instituciones militares vayan teniendo, por las circunstancias, un giro donde se pase de la defensa nacional a la seguridad pública.
Perfil de Luis Rodríguez Bucio
Ingresó como cadete al Heroico Colegio Militar en 1973, graduándose como Subteniente de Infantería en 1977, siendo asignado al Segundo Batallón de Guardias Presidenciales, donde prestó sus servicios hasta el año 1985.
Durante ese período desempeñó comisiones en la Sección Segunda del Estado Mayor Presidencial y en la Secretaría de Relaciones Exteriores, en esta última como Ayudante del Secretario de Relaciones Exteriores en los años 1981 y 1982.
En 1985, ingresó a la Escuela Superior de Guerra, localizada en San Jerónimo Lídice, Ciudad de México.
En enero de 1989 estuvo en Estado Mayor Presidencial, donde fungió como Subjefe de la Sección Cuarta hasta julio de 1990.
De agosto de 1990 a junio de 1992, fue designado para realizar el Curso de Estado Mayor en la República Federal de Alemania, el cual comprendió un año de estudios del idioma alemán en el Instituto Federal de Idiomas, en Hurth, Alemania; una estada de un mes en una Brigada de Infantería en la ciudad de Flensburg; y diez meses del curso de Estado Mayor en la Academia de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas Alemanas, en Hamburgo.
De julio de 1992 a febrero de 1993, se desempeñó como Oficial de Estado Mayor en la Sección Quinta (Planes Estratégicos), del Estado Mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional.
De marzo de 1993 a marzo de 1994, se desempeñó como Subjefe de Estado Mayor en el Cuartel General de la 19/a. Zona Militar, en Tuxpan, Veracruz. Durante ese período fue comisionado por tres meses como Subjefe de Estado Mayor de la Fuerza de Tarea Marte XXII, en Badiraguato, Sinaloa, cuya función principal era la erradicación de plantíos de enervantes en los Estados de Sinaloa, Chihuahua y Durango.
De abril de 1994 a marzo del 2000, se desempeñó como Coordinador de grupos interinstitucionales en trabajo de campo, en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN).
De abril del 2000 a marzo del 2002, se desempeñó como Agregado Militar y Aéreo en la Embajada de México ante la República Federal de Alemania, con sede en la ciudad de Berlín y en la Embajada de México ante la República Federal de Polonia, con sede en Varsovia.
De abril a julio del 2002, fungió como Jefe de Estado Mayor en el Cuartel General de la 14/a Zona Militar, en la ciudad de Aguascalientes. Durante ese período participó como Jefe de Estado Mayor de una Brigada de Infantería Circunstancial para Adiestramiento, en Santa Gertrudis, Chihuahua.
En 2002 y 2003, realizó la Maestría en Seguridad y Defensa Nacionales en el Colegio de Defensa Nacional, en Popotla, Ciudad de México, integrando la XXII Antigüedad. El título de su tesis fue “Capacidad de los grupos armados que han surgido en el país y su efecto en la Seguridad Nacional”.
De agosto del 2003 a septiembre del 2004, fue Comandante del Segundo Batallón de Fuerzas Especiales, con sede en Temamatla, México, periodo en el que participó al Mando del Batallón en Operaciones contra el narcotráfico en los Estados de Tamaulipas, Durango y Sinaloa.
De octubre del 2004 a abril del 2010, se desempeñó como Subjefe y Jefe del Grupo de Análisis e Información de Narcotráfico (GAIN), en el Estado Mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional.
De mayo del 2010 a septiembre del 2011, se desempeñó como Comandante de la Guarnición Militar de Cancún, Quintana Roo.
De octubre del 2011 a junio del 2013, fue asignado al Cuartel General de la IV Región Militar como Coordinador de Operaciones, en Monterrey, Nuevo León, para atender las actividades de los grupos vinculados al narcotráfico que operaban en los Estados de Nuevo León, Tamaulipas y San Luis Potosí.
De junio del 2013 a febrero del 2017, se desempeñó como Director del Centro de Investigación y Desarrollo del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, que administra y gestiona proyectos de investigación y tecnológicos, en las áreas de Ciencias Militares, Ciencia, Tecnología e Innovación y Ciencias Biomédicas.
De junio del 2013 a junio del 2016, realizó el Doctorado en Defensa y Seguridad Nacional, en el Centro de Estudios Superiores Navales (CESNAV), de la SEMAR, con el tema “Participación de las Fuerzas Armadas mexicanas en la Estrategia de Combate al Narcotráfico del Presidente Felipe Calderón Hinojosa”, obteniendo mención honorífica.
Andrés Yáñez
17 abril, 2019 at 1:53 am
En la sesión de la Cámara de diputados se dio una votación unánime para la aprobación de la Guardia Nacional, y la condición fue que EL MANDO FUERA CIVIL.
Realmente la unanimidad fue posible porque el compromiso era ese.
Por qué, entonces, no se respetó el acuerdo hecho con las demás fracciones?
Y no sólo la oposición pedía mando civil, dentro de Morena hubo voces que también lo pedían así. Más todavía, una franja mayoritaria de la
sociedad estaba en esa tesitura. La misma CNDH, incluída.
En ese mismo sentido, la ONU se mostró preocupada por la decisión presidencial de poner un mando militar!!!
Y, el colmo, un personaje castrense que había servido en ese mismo sentido al usurpador etílico!!!
Qué aberración!!! Y qué poca imaginación y congruencia!!!
Y qué poco respeto a un acuerdo político con las fracciones opositoras del Congreso!!!
Pregunto: así se honra la palabra?
Eso fue ni más ni menos que una chicanada.
En vía de mientras, la militarización se consumó y, para Ripley, de manos de quien menos se esperaba.
Eso también lo registrará la historia!!!