Sin pruebas, García Luna trata de incriminar a AMLO con el narco

A unos días de que se conozca la sentencia que le dictarán por supuestamente brindar protección al narcotráfico, el ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, hizo revelaciones en una carta escrita que entregó  al periodista Keegan Hamilton. En ella, el que fuera brazo derecho de Felipe Calderón Hinojosa insiste en declararse inocente de los cargos que le acusan, pero además, sin ninguna prueba, intenta incriminar al Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) con el crimen organizado.

Según el ex funcionario, la reciente captura de Ismael ‘El Mayo’ Zambada en los Estados Unidos podría corroborar su afirmación, además de que existen audios, videos y registros  de comunicación que ligan al Presidente de México y sus operadores, con narcotraficantes.

“Es del conocimiento público y está en los registros oficiales de México y Estados Unidos, los contactos, videos, audios, fotografías, registro de comunicación y gestión entre el actual Presidente de México, Andrés López Obrador, y sus operadores con los líderes del narcotráfico y sus familias, en particular con los narcotraficantes que fueron utilizados como testigos en mi contra durante el juicio, quienes inclusive durante el juicio imputaron al Presidente López Obrador y a sus operadores de estar vinculados con ellos y el narcotráfico”, asevera.

En su carta, el ex funcionario desarolla una férrea defensa de su persona e incluso asegura que la Fiscalía de Nueva York le ofreció un acuerdo que lo dejaría en libertad en poco tiempo, pero que no aceptó porque implicaba trastocar la vida institucional del país.

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“La perspectiva era imputar personas e instituciones que en el corto plazo debilitaría el desarrollo, paz pública y vida institucional del país. Evidentemente no acepté y la reacción fue explosiva”, asegura.

Además, descredita a todas las personas que testificaron en su contra porque son criminales reconocidos y declarados.  En su opinión, el único testigo fehaciente es el embajador de Estados Unidos en México. 

“El único testigo honorable utilizado por la fiscalía en el juicio fue el embajador de EUA en México, quien ratificó que fui una persona clave en el gobierno de México en el combate al narcotráfico ya que por razones sistemáticas del gobierno que tenía en las áreas de seguridad e inteligencia de EUA, no había recibido ningún informe que indicara que yo fuera corrupto o que estuviera vinculado en el narcotráfico, y que de haber existido el tendría que haber sido informado y no fue así”, menciona.

La carta en cuestión fue compartida durante la tarde de este martes 17 de septiembre por el comunicador mencionado, mientras que la sentencia en contra de quien fuera el brazo derecho de Felipe Calderón está pactada para el próximo 9 de octubre, tras encontrársele culpable de tener nexos con el Cártel de Sinaloa.

“Durante los primeros días reiteradamente me ofrecieron un acuerdo con la fiscalía de Nueva York para que me inculpara por delitos vinculados al narcotráfico a cambio de estar detenido poco tiempo (6 meses) y recibir beneficios económicos, de esta forma convertirme en testigo”, señala carta recientemente revelada.

En la misiva, García Luna señala que al negarse a aceptar el acuerdo, las autoridades estadounidenses tuvieron una “reacción explosiva” en su contra, pero sostiene que es inocente de los delitos que se le acusan, pues asegura que los fiscales no presentaron ninguna prueba material sobre las actividades criminales de las que se le acusa.

Genaro García Luna. Foto Tercero DíazCuartoscuro

“No presentaron ningún documento, fotografia video, audio, registro de comunicación-telefónico, documentos fiscales o financieros, cuentas bancarias, o registro alguno de contacto con algún miembro del narcotráfico o su familia, como lo señalaba el gobierno de México”, asegura el ex funcionario.

“De igual forma, en México, un tribunal colegiado del Poder Judicial resolvió en octubre de 2023, después del juicio, que no había pruebas que acreditaran ingresos ilegales a mi patrimonio previo al 2012 y durante más de 20 años que me desempeñé como funcionario público. En suma, tanto en Estados Unidos y México, los respectivos poderes judiciales resolvieron que mi patrimonio de más de 20 años es lícito y que no hay un solo peso dólar vinculado al narcotráfico”, apunta.

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Al final de su carta, García Luna expone las condiciones de su estancia en el MDC de Brooklyn, las que considera son  “infrahumanas”, además de que ha sido llevado a las celdas de castigo sin una razón aparente.

“He presenciado homicidios, apuñalamientos y amenazas sistemáticas a mi integridad; fui segregado casi un año a las celdas de castigo sin haber violado alguna norma ó falta al reglamento y sin tener un registro de mal comportamiento, escribe el exsecretario de Seguridad.

De igual manera, señala  que ha convivido con compañeros de celda que han tratado de involucrarlo con el narcotráfico.