El secretario de Desarrollo Social, Eviel Pérez Magaña, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores y el delegado de la Sedesol en esa entidad, Carlos Porfirio Ortegón Alvarado, triangularon 50 millones de pesos en medio de un proceso electoral.
Los recursos estaban destinados a “superar la situación de emergencia causada por la falta de empleo ocasionada por la inseguridad y la extrema pobreza” en 42 municipios de Guerrero, de acuerdo con información publicada por Proceso.
Dichos recursos federales surgieron del Programa Empleo Temporal Inmediato (PETI) y fueron operados directamente entre abril y mayo de 2018 por Ortegón Alvarado, quien fue designado como delegado federal de Sedesol en esa entidad el 5 de abril y previamente fungía como Coordinador de Giras de Astudillo.
Proceso indica que en este desvío también está implicado el actual secretario de Desarrollo Social de Guerrero, Mario Moreno Arcos, exalcalde de Chilpancingo y primo de Humberto Moreno Catalán, líder de la autodefensa de Tlacotepec que mantiene una seria confrontación con la comunitaria de Chichihualco, lo que ha ocasionado el cierre de escuelas y centros de salud, así como crímenes y el desplazamiento de personas por la violencia en la sierra de la entidad.
Además, pese a que se trata de información pública de oficio, de acuerdo con la Ley de Transparencia, no existen datos abiertos sobre “los proyectos, obras y ciudadanos beneficiados” con la inversión millonaria.
Los niveles de violencia y pobreza registrados en Guerrero, mantienen a la entidad en los primeros lugares de inseguridad y marginación en el país, de acuerdo con indicadores del INEGI y el gobierno federal.
Proceso reporta que fue el pasado 23 de abril cuando Astudillo solicitó al titular de Sedesol federal, Eviel Pérez Magaña, mediante el oficio PE/SP/026/2018, que le autorizara una transferencia extraordinaria de 50 millones, mediante la delegación estatal que dirige su ex empleado, Carlos Ortegón.
Dichos recursos supuestamente serían utilizados para “realizar acciones y proyectos que contribuyan a superar la situación de emergencia causados por falta de empleo ocasionados por la inseguridad y en beneficio a sectores vulnerables y en extrema violencia”, afirmó en ese entonces el mandatario estatal.
Un día después, el secretario de Desarrollo Social del estado, Mario Moreno Arcos, abrió la cuenta 26644 de inversión en una sucursal del banco Scotiabank con 100 mil pesos en efectivo para que la delegación federal transfiriera ahí los recursos millonarios.
No obstante, fue hasta el 14 de mayo cuando Astudillo designó a Moreno Arcos como encargado de coordinarse con el delegado federal de Sedesol y hacer los trámites correspondientes para bajar los 50 millones autorizados.
Se desconoce cuál fue el uso del dinero público solicitado en pleno proceso electoral.