Salinas usó la Partida Secreta para financiar a Aguilar Camín

Haciendo uso de la partida secreta, Carlos Salinas de Gortari aprovechó para financiar, entre 1989 y 1993 al comunicador y escritor Héctor Aguilar Camín, según revelan documentos a los que el medio de comunicación electrónico, Contralínea, tuvo acceso.

Dichos oficios dan cuenta de cómo, apenas a los cuatro meses de haber asumido como Presidente de México, el Gobierno de Salinas comenzó a enviar dinero a Aguilar Camín, pues fue el 7 de abril de 1989 que éste emitió el primer “recibo provisional” con su firma, a cambio de un cheque por 250 millones de pesos de aquél entonces.

El pago se hizo “por adelantado” para llevar a cabo un estudio llamado “El desafío educativo”, para el que no hubo una licitación previa, y el cuál fue entregado a la empresa Nexos-Sociedad, Ciencia y Literatura, así como al Centro de Investigación Cultural y Científica (CICC).

Esa fue la primera de varias facturas cobradas por adelantado, pese a los numerosos retrasos en las entregas que se generaron y, por si fuera poco, también fueron beneficiarios de “ayudas solidarias”, luego de que Aguilar Camín escribiera a Salinas de Gortari pidiéndole dinero para poder atender apuros económicos.

Como ejemplo, Contralínea hace referencia a una carta del 27 de agosto de 1990 en la que el escritor adjunta una factura complementaria por 248 millones 220 mil viejos pesos. En dicha misiva, explicaba que por la complejidad del propio estudio y diversos compromisos con el Inegi, los investigadores se habían retrasado seis meses, generando un costo adicional por 115 millones 920 mil pesos.

Apenas un día después de que la carta fuera enviada, Aguilar Camín recibía un nuevo cheque por 364 millones 140 mil pesos, desde el Banco Mexicano Somex, correspondiente a la partida secreta.

El 18 de octubre de ese año también se emitió un cheque, por 795 millones 880 mil 500 viejos pesos, pese a que el estudio de Aguilar Camín no había entregado aún los trabajos para los que había sido contratado.

El periodista Miguel Badillo reveló que el 5 de septiembre de 1991, Nexos-Sociedad, Ciencia y Literatura SA de CV, recibió un cheque por 682 millones 145 mil 500 pesos, por pago complementario de investigaciones.

Ese mismo día, Nexos presentó también una factura equivalente al 50% del costo de un estudio más, titulado “América del Norte: evaluación del desempeño educativo”, por un total de 150 millones 103 mil 750 pesos. Seis días después, Jesús García Ramírez firmaba el recibo por dicha cantidad en papel membretado de la Presidencia de la República.

El 1 de julio de 1992, el estudio presentaba otra factura correspondiente al 50% más, por un monto de 143 millones 677 mil 500 viejos pesos y, 12 días después, una factura más, por 496 millones 422 mil 500 pesos de aquél entonces, como “anticipo” para el proyecto “América del Norte: evaluación del desempeño educativo en seis grandes ciudades”.

Tan solo el 6 de julio, García Ramírez firmaba un recibo por 640 millones de pesos, provenientes de la Presidencia de la República.

Los documentos, menciona Contralínea, también contienen una tarjeta informativa que habría enviado Aguilar Camín a Salinas de Gortari en septiembre de 1993, donde le decía:

“Presidente, sé que no hemos terminado, pero nuestras finanzas, por la misma demora, andan mal. Si pudieras anticiparnos el saldo de la investigación, será una gran ayuda (solidaria)”, y firmaba con “Un abrazo”, con su puño y letra.

Ante esta solicitud, Salinas de Gortari envió, el 20 de septiembre de 1993, un nuevo cheque por 542 mil 180.45 nuevos pesos.