Padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa que desaparecieron en Iguala Guerrero en septiembre de 2014 exigieron que el expresidente Enrique Peña Nieto declare con respecto a su presunta participación en los hechos y que se abra una investigación contra el Ejército Mexicano y la Secretaría de Marina (Semar).
Esto, tras las revelaciones de este lunes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre la participación de la Secretaría de Marina (Semar) en la alteración de pruebas y manipulación de escenarios.
Ocho años han pasado desde la tragedia y aún existen muchas reticencias del “Ejército mexicano y de las Fuerzas Armadas que han jugado sucio”, acusó Vidulfo Rosales, abogado de los padres de los 43.
“¿Cómo es posible que la Sedena, desde el tiempo que gobernó Peña Nieto, siempre ocultó información…? ¿Teníamos motivos para sospechar del Ejército mexicano? Sí, porque sabíamos que ellos estaban involucrados en la desaparición de nuestros hijos…”, mencionó Emiliano Navarrete, padre de uno de los jóvenes desaparecidos.
Navarrete además pidió al Gobierno de la 4T buscar las herramientas legales para que Peña Nieto sea llamado a declarar y sea investigado para conocer a qué grado estuvo involucrado en la desaparición de los normalistas.
Inicia conferencia de familiares de #Ayotzinapa tras informe #GIEI. Transmite @CentroProdh pic.twitter.com/jIDRUlpVAF
— paula mónaco felipe (@monacofelipe) March 29, 2022
“Si nos ocultaron esto, ¿qué más pueden ocultar? El que miente una vez, miente dos veces, o tres, y el Gobierno utiliza el poder sólo para sí mismo y no da justicia al pueblo”, mencionó.
Asimismo, familiares de los estudiantes llamaron al Presidente, Andrés Manuel Lopez Obrador, a moderar sus conferencias matutinas a cambio de priorizar la búsqueda de los 43 normalistas, quienes desaparecieron el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, en una situación que aún no ha sido aclarada.
Hoy en día aún se investiga qué autoridades participaron en el delito en conjunto con el crimen organizado.
Rosales aseguró que, luego de las revelaciones del GIEI y la evidencia que demuestra que la “verdad histórica” de Enrique Peña Nieto es falsa, el Gobierno actual debe privilegiar la revelación del paradero de los jóvenes.
“Nos vieron la cara durante tres años. Las instituciones jugaron con nosotros. Nos hicieron firmar en diciembre un decreto presidencial donde se comprometían a entregar toda la clase de información que hubiese sobre caso Ayotzinapa. Nos hicieron ir Batallón 27 a mostrarnos información a sabiendas que no íbamos a encontrar nada, nos hicieron sacarnos la foto con el encargado de la Secretaría de la Defensa Nacional… ¿Cómo no estar enojado si, a tres años, sale una información que tenía que haber sido entregada en su momento?”, declaró Mario González, padre de uno de los 43 jóvenes desaparecidos.
Este lunes, el GIEI reveló que elementos de la Secretaría de Marina mexicana manipularon el basurero de Cocula, en Guerrero, para presuntamente ocultar las pistas sobre los 43 estudiantes desaparecidos.
Esto acaba nuevamente con la llamada “verdad histórica” sobre el caso Ayotzniapa promovida por el gobierno anterior.
Desde aquél septiembre se desconoce el paradero de los 43 normalistas, ante lo que Santiago Aguirre, titular del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), acusó que el Ejército Mexicano sigue sin contribuir de forma plena a la solución del caso, además de desacatar la orden presidencial de contribuir a la investigación.
“¿Cómo no estar enojados si no sabemos nada de nuestros hijos? No hablo de los mandos pasados, hablo de estos mandos que nos prometieron llegar a la verdad, estos mandos que jugaron con nosotros, que lo único que querían era la fotografía. ¿Qué es lo que está pasando? ¿Por qué la manipulación tan cruel que se ve en el video?”, cuestionó.
También le dijo a AMLO que: “Señor presidente, usted tiene toda la voluntad, pero sus instituciones no le hacen caso”.
Añadió que la crisis de desapariciones en México es un problema del presente, no una herencia del pasado, en la que el caso de Ayotzinapa es sólo uno entre miles de casos.
