Sin las mínimas medidas de protección ante la emergencia sanitaria causada por el Covid-19, cerca de las 12 del día de hoy, el Gobierno de Tamaulipas obligó a los trabajadores de diferentes dependencias a realizar una marcha rumbo al Palacio de Gobierno para brindar apoyo al gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, en contra del desafuero solicitado por la Fiscalía General de la República (FGR) ante la Cámara de Diputados.
Integrantes de los comités ciudadanos de la dirección de bienestar social, afirmaron “nos tienen bien vigilados, nos revisan a quién le damos like, nos dicen que debemos compartir lo del gobierno municipal y ahora esto del gobernador”, señaló una vecina del poniente de la ciudad, integrante de estos comités.
De Tampico a ciudad Victoria, que sorpresivamente amaneció en semáforo verde, circulan caravanas de taxis y alrededor de cien camiones que transportan a los acarreados que en días previos, les prometieron un apoyo económico y una despensa, así lo dejan ver los mensajes que circularon en redes sociales empleados municipales que decidieron compartir estas conversaciones, pero guardando su identidad, ya que tienen temor a represalias laborales.
Uniformados de azul y blanco, los “manifestantes” avanzan formados por dependencia como la de Cultura, Educación y Finanzas para mantener el “orden”: En tanto, ciudad Mante se quedó sin transporte, los choferes se quejaron “fuimos obligados a asistir, de no hacerlos, nos retirarían el permiso de circulación”.
En la manifestación no se siguieron las medidas de protección sanitaria como la sana distancia y el uso de cubrebocas. A pesar de que no fue una multitudinaria, se responsabiliza al gobierno estatal del incremento en los contagios y, por ende, fallecimientos por Covid-19 luego de su actitud irresponsable al obligar, exigir y permitir que los manifestantes se dieran cita para apoyar al gobernador en contra de su proceso de desafuero.
A la marcha se le sumó una protesta en Altamira, en donde policías estatales exigen el pago de adeudos y viático, además piden que paren los abusos laborales a los que son sometidos y amenazan con dejar sin vigilancia la zona sur del estado.