San Pedro Tlaquepaque ha recuperado un valioso inmueble que durante años se destinó a eventos privados, transformándolo en un punto de encuentro para el arte y la cultura.
La presidenta municipal, Laura Imelda Pérez Segura, inauguró Casa Colibrí, un recinto dedicado a las y los artesanos de este Pueblo Mágico, con el objetivo de visibilizar y preservar su legado.
Ubicada en el corazón de Tlaquepaque, Casa Colibrí ofrecerá un espacio para exposiciones permanentes y temporales, conferencias, conciertos y actividades de promoción artesanal. Pérez Segura destacó la importancia de esta recuperación, asegurando que “el arte, la cultura y la artesanía estarán al alcance de todas y todos, de manera orgullosa y monumental”.
Anteriormente conocida como “Casa Morelos”, este inmueble fue inaugurado en 2020 con la promesa de ser un espacio cultural, pero en la práctica solo albergó dos exposiciones y fue utilizado principalmente para celebraciones privadas.
Hoy, con su nueva identidad, Casa Colibrí funcionará como un sitio de exhibición permanente y promoción de la alfarería tradicional.
Arte y tradición: exposiciones destacadas
Para su apertura, Casa Colibrí alberga la exposición “Una mirada al pasado y el presente”, con piezas del maestro Tomás Coffen, sus hijos Rocío, Pilar, Sofía, Carlos y su nieta Haideé. Además, se ha instalado una galería permanente de “Maestros Alfareros”, donde las y los artesanos moneros tendrán un espacio digno para exhibir su obra.
El recinto también será escenario de charlas, cursos de capacitación, subastas sin fines de lucro y conciertos mensuales del reconocido trovador Paco Padilla y amigos.
Murales que cuentan historias
Como parte de la transformación cultural en Tlaquepaque, la alcaldesa también inauguró en el Centro Cultural El Refugio el mural “El Corazón de Tlaquepaque”, del artista Enrique Chiu. La obra plasma la esencia artesanal y cultural del municipio, con un corazón entrelazado con flores y símbolos representativos de la identidad mexicana.
En el mismo espacio, se presentó la exposición “Humanidad Migrante”, también de Enrique Chiu, acompañada del documental “Un Mundo sin Muros”, que narra historias de resiliencia en la frontera con Estados Unidos. Como parte de su aportación a la comunidad, Chiu obsequió un mural itinerante titulado “Corazón de Tlaquepaque”, que podrá ser apreciado hasta junio.
Con la inauguración de Casa Colibrí, el gobierno municipal reafirma su compromiso con la cultura y el arte, devolviendo a la comunidad un espacio que ahora será epicentro de la creatividad y la expresión cultural. De un salón de fiestas privadas a un templo del arte, este renacimiento simboliza el rescate de la identidad de Tlaquepaque como la “Ciudad de la Esperanza”.
