La magia de la Navidad se siente en cada rincón de San Pedro Tlaquepaque gracias al programa “Luces de Esperanza”, una iniciativa impulsada por el gobierno municipal bajo la dirección de la alcaldesa Laura Imelda Pérez Segura, quien busca llevar luz, alegría y unión familiar a las comunidades del municipio.
Durante este fin de semana, las delegaciones de Toluquilla, López Cotilla, Santa María Tequepexpan y La Ladrillera se llenaron de espíritu navideño con actividades que incluyeron espectáculos de música, entretenimiento y la entrega de regalos.
En cada parada, la alcaldesa ofreció un mensaje emotivo sobre el significado de la Navidad, destacando la importancia de la esperanza, la paz y la renovación.
“El nacimiento de Jesús nos inspira a renovar nuestro espíritu y fortalecer los lazos que nos unen como comunidad. Esta es una época para reflexionar, convivir y compartir alegría”, expresó Pérez Segura ante cientos de familias.
Un recorrido lleno de luz
La gira de “Luces de Esperanza” continuará iluminando las delegaciones y agencias municipales en los próximos días:
- 10 de diciembre: La Calerilla
- 11 de diciembre: Tateposco
- 12 de diciembre: San Sebastianito
- 13 de diciembre: Las Juntas
- 14 de diciembre: San Pedrito y San Martín de las Flores
- 15 de diciembre: Santa Anita
Con cada encuentro, el programa busca no solo celebrar la temporada navideña, sino también fortalecer el tejido social y promover el bienestar emocional de las familias tlaquepaquenses.
“Queremos que cada rincón de Tlaquepaque se llene de esperanza, de risas y de convivencia familiar. Estas luces simbolizan la unión y el espíritu solidario de nuestra comunidad”, señaló la presidenta municipal.
“Luces de Esperanza” reafirma el compromiso del gobierno municipal de crear espacios de encuentro y celebración para todos los ciudadanos, llevando el mensaje de que juntos se puede construir un mejor futuro.
Una Navidad para todos en Tlaquepaque
En cada una de las paradas del programa, niñas, niños y adultos han disfrutado de momentos de alegría que refuerzan el espíritu navideño. Para muchos, estas actividades representan no solo una tradición, sino también una oportunidad de fortalecer los lazos familiares y comunitarios.