En 2022, el Instituto Nacional Electoral (INE) destinó 534.1 millones de pesos en la compra de servicios a entes externos, entre los que figura la contratación de tres estudios cuantitativos para evaluar la imagen del instituto, con un total “adjudicado” de 998 mil 528 pesos.
El Informe anual de gestión y resultados del Órgano Interno de Control del INE 2022 detalla que dicho contrato tuvo una “suficiencia presupuestal” de 1 millón 100 mil pesos, y al final el monto adjudicado fue de casi un millón.
Asimismo detalla que, de los tres encargos para evaluar la imagen del Instituto, uno fue mediante la modalidad de cara a cara, en vivienda, y dos más a través de levantamiento telefónico.
Cabe mencionar que, en uno de los estudios, se cuestionó a la ciudadanía su opinión sobre el entonces proyecto de reforma constitucional en materia electoral.
En el informe hecho por el Órgano Interno de Control (OIC) se detallan los conceptos del monto adjudicado, pero en el acta del fallo correspondiente aparecen dos subtotales: uno de 476 mil 800 y otro por 384 mil, dando un total de 860 mil 800 pesos antes de impuestos.
Además, un contrato aparte presenta la entrega de 4.4 millones como “asesoría” para la elaboración del informe de gestión del consejero presidente, Lorenzo Córdova, quien terminará su gestión el próximo 3 de abril.
Según las 99 sesiones en las que participó el OIC, se establece que el INE había solicitado 680.6 millones, es decir, 22% de lo que gastó, por lo que el contralor reiteró la recomendación de realizar el anteproyecto de presupuesto “con mayor rigor, que impida solicitar recursos mayores a los efectivamente requeridos”.
Del monto general, la mayor parte tiene que ver con servicios de sistemas informáticos, aunque destaca que en 2022, aún con los avances digitales, el instituto destinó 37.7 millones de pesos en impresiones; 1.4 millones para imprimir y distribuir materiales para las elecciones de 2023 y 9.7 millones para contratar los servicios de una agencia de viajes para la adquisición de pasajes aéreos nacionales e internacionales.
Asimismo, el Instituto gastó 6.5 millones de pesos para la fabricación de 90 urnas electrónicas modelo 6.0; también 9.7 millones para materiales y útiles de oficina, administrados a través de una tienda virtual para las oficinas centrales.
Mientras tanto, para los órganos centrales tuvo un costo de un millón de pesos el suministro e instalación de llantas y rines para el parque vehicular.
También se usaron 2.4 millones de pesos para la contratación de “técnicos especializados para la producción de programas periodísticos para la televisión” y, 28.3 millones más, esperaban ser destinados a la contratación de una “agencia para el desarrollo de la creatividad”, de mensajes que se divulgarían en medios de comunicación, pero el contrato fue suspendido por el OIC.
