El Centro de Estudio de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados ha dado a conocer que el gasto de las pensiones del Bienestar para las personas mayores de 65 años continuará aumentando sostenidamente.
El gasto asignado a este programa en 2022 es de 238 mil millones de pesos, mientras que en 2023 se contempla destinar 335.5 mil millones de pesos, es decir, 34.3% en términos reales.
La Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores se elevó, desde 2020, a rango constitucional en el artículo 4 de la carta magna.
Según el análisis del CEFP, titulado “Aspectos relevantes sobre pensiones en los Criterios Generales de Política Económica 2023”, los criterios refrendan la estrategia de la 4T para alcanzar la justicia social y el bienestar integral de los adultos mayores en la edad de retiro.
Por eso, en 2023 se llevarán a cabo acciones que incidirán en una mejor integración de los tres componentes centrales del sistema de pensiones:
- La pensión para el bienestar de las personas adultas mayores
- La pensión ligada al empleo
- El ahorro voluntario
Para lograrlo, en diciembre de 2020 se reformaron la Ley del Seguro Social y la Ley de los sistemas de Ahorro para el Retiro (LSAR) para disminuir las semanas de cotización, aumentar las aportaciones de forma paulatina y mejorar la pensión que recibirán los trabajadores formales a su retiro.
“Con estas modificaciones, el 95% de los nuevos pensionados de 2021 y 2022 pudieron acceder a este derecho derivado de la reducción de semanas cotizadas”.
El análisis también revela que las comisiones que cobran las administradoras de fondos para el retiro (Afore) han decrecido a niveles históricos luego de la reforma a la LSAR, al grado de alcanzar estándares internacionales, al pasar de 1.01% en 2018 a 0.57% en 2022.
“La disminución favoreció que los trabajadores mantuvieran 11.8 mil millones de pesos de saldo en sus cuentas individuales, mejorando sus perspectivas respecto a las tasas de reemplazo en 6% hacia el largo plazo”, añade.
En junio pasado, los recursos administrados por las Afore superaron los 5 mil millones de pesos, es decir 18% del PIB, “colocándose como el segundo intermediario financiero más importante del país detrás de la banca comercial con una participación del 18.6% del total del sector.
Además, “el SAR administró 71.4 millones de cuentas y otorgó, mediante el Afore, un rendimiento histórico real de 4.84% mientras el rendimiento nominal ha sido de 10.62%, convirtiendo a las Afore en el mejor vehículo de inversión de largo plazo para el ahorro de los trabajadores en el sistema financiero mexicano”.
Los activos netos de las Afore, indica, “han crecido año con año, hasta alcanzar en junio de 2022 un nivel de 5 billones de pesos, equivalente al 18% del PIB”.
