Uno de los tres comisionados que aspira a presidir el Instituto Nacional de Transparencia (INAI), Adrián Alcalá Méndez, destinó 1 millón 329 mil 718 pesos en viáticos y gastos de representación, tan solo entre enero de 2022 y septiembre de 2023.
A estos gastos, según reporta la periodista Nancy Flores para Contralínea, se le suman 287 mil 20.47 pesos en 2021 y 7 mil 578.35 pesos en 2020, dando un total de 1.6 millones de pesos.
Según las facturas que el comisionado entrega para justificar los gastos, no sólo se ha usado recurso público para pagar pasajes de avión, alimentos y estancias en hoteles, sino también botanas, refrescos y hasta café de tiendas de conveniencia.
Estos viáticos, indica Flores, se han hecho pese a que Alcalá es uno de los funcionarios mejor pagados del sector público, recibiendo un salario mensual de 156 mil 085 pesos brutos, así como 885 pesos de ayuda para despensa.
Asimismo, el Inai revela que en julio pasado se le pagó, adicionalmente, una “asignación adicional” de 4 mil pesos, y cada trimestre de este año, 45 mil pesos brutos como “prestación extraordinaria”.
Además, el funcionario registra con cargo al erario gastos de representación -desayunos, comidas y cenas- en lujosos restaurantes de la Ciudad de México, en donde se reunió con empresarios, políticos y compañeros comisionados y algunos subordinados, indicando que se trataba de “reuniones de trabajo”.
La periodista señala que ninguno de estos fue previamente autorizado por la Dirección General de Administración del Inai, pues según los “justificantes”, las reuniones fueron “emergentes”, es decir que no estaban agendadas.
Nancy Flores cuestionó a Alcalá sobre si estos gastos no rayan en abuso del dinero público, a lo que el funcionario respondió:
“Mire, en ocasiones, efectivamente, puede sonar como un abuso, pero en muchas otras vamos a estas jornadas y obviamente no voy con alguna persona en particular. A lo mejor vamos y con estas jornadas pues vamos y comemos. Entonces, estos son los motivos del gasto, que a lo mejor puede representar una comida de 2 mil pesos. Pero también hay otras veces en que solamente lo que alcanzo a comer son unas papitas y un refresco en el OXXO. De verdad, en algunas ocasiones a lo mejor tenemos un poco más de tiempo, pero no voy solo y la comida no solamente es para mí, sino para, a lo mejor y van conmigo a algunas personas, tanto del propio Instituto que nos acompañan, o de los órganos garantes, o personas que forman parte de la socialización de la capacitación. Son personas a las cuales [pagarles los alimentos con el presupuesto del Inai] está dentro de la norma”.
Explicó también que el gasto de los servidores públicos adscritos al Instituto sí es limitado:
“Tenemos un gasto por normatividad, que si no se cumple, se regresa, o que si me excedo, pues ya justamente esos excesos, el excedente. Tenemos un tope, tanto en habitación como en gasolina, como en alimento. Entonces, eso es lo que está sujeto a la propia normatividad”.
Alcalá agrega que dichos gastos son auditadles por parte de la Auditoría Superior de la Federación y la contraloría interna, y que hasta ahora, ninguno de sus viajes o gastos de representación han sido objeto de un cuestionamiento.
Viajes
La periodista señala una cena en el restaurante argentino Piantao por 6 mil 175 pesos en enero pasado. Ahí, Alcalá se habría reunido con integrantes de la asociación Open Government Partnership y con el Director General de Políticas de Acceso del Inai, Jaime Abraham Cerdio Moisés “para dar seguimiento a los proyectos de las políticas en materia de datos abiertos derivados de la presentación, ese mismo día, del reporte de OGP”.
Después se volvió a reunir con dicha asociación, también con cargo al erario público. Esta reunión habría sido el 2 de agosto, en el restaurante Sylvestre Artz, con la intención de dar seguimiento al Plan de Acción de Gobierno Abierto. La cena habría tenido un costo de 4 mil 367 pesos.
La periodista destaca de estas cenas, no solo los elevados precios, sino a los comensales: “Open Government Partnership es la asociación que invitó a Alcalá a visitar Tallin, Estonia, entre el 2 y el 10 de septiembre pasados y que se pagó con dinero público: un total de 27 mil 693.95 pesos.
El funcionario justificó que asistió en representación del pleno del Inai, a la 8 Cumbre Mundial de la Alianza para el Gobierno abierto, como parte del proyecto “trabajo en redes para cumplimiento de la agenda internacional”.
Flores expone que, entre enero y septiembre de 2023, Alcalá estuvo de viaje 108 días:
- 11 en enero
- 19 en febrero
- 15 en marzo
- 10 en abril
- 10 en mayo
- 15 en junio
- 4 en julio
- 14 en agosto
- 10 en septiembre
En total, el costo de los viáticos ascendió a 410 mil 745.63 pesos.
Además de Estonia, el funcionario viajó a Londres, Inglaterra y Buenos Aires, Argentina.
Por su parte, en 2022 visitó:
- Estambul, con un costo de 93 mil 709.05 pesos
- París, Francia, con un costo de 69 mil 492.04 pesos
- Santo Domingo, República Dominicana, con un costo de 62 mil 55.07 pesos
- Cartagena (Murcia), España, con un costo de 57 mil 401.89 pesos
- Los Ángeles, Estados Unidos, con un costo de 25 mil 438.29 pesos
- Valparaíso, Chile, con un costo de mil 591.82 pesos, sin que se indique cómo se solventaron la totalidad de los gastos
Además visitó destinos nacionales, con costos que destacan por ser elevados:
- Monterrey, por 18 mil 875.09 pesos
- Oaxaca, por 15 mil 883.96 pesos
Gastos de representación
De sus comidas en restaurantes de la Ciudad de México, en 2023 cargó 19 al erario público, por un total de 32 mil 906.52 pesos.
Al respecto, el funcionario explicó que:
“No significa que nos pagan los desayunos o las comidas y las cenas diarias, justo son reuniones especiales que, en muchas ocasiones, son fuera de oficina. Son gastos que están previstos para este tipo de reuniones. Y todas las instituciones del Estado mexicano contamos con este tipo de situaciones”.
