Hasta hoy, hay varias certezas en este país sobre el caso Odebrecht:
1.- Odebrecht financió la campaña de Enrique Peña Nieto en 2012. Lo hizo vía empresas relacionadas con Emilio Lozoya Austin. El financiamiento se hizo a cambio, claro está, de millonarios contratos para la empresa brasileña.
2.- Enrique Peña Nieto y todo el PRI intentaron e intentan, desesperadamente, que ese financiamiento no se sepa, o se sepa lo menos posible. O que se sepa, pero que no se castigue ni hoy ni nunca.
3. Por eso EPN destituyó a Santiago Nieto de la Fiscalía Especializada para Delitos Electorales (Fepade) de la Procuraduría General de la República (PGR). Y no es que la continuidad de Santiago hubiera garantizado el llegar hasta “las últimas consecuencias”, sino, más bien, el hecho de evidenciar la alta corrupción del actual gobierno tan cerca de la derrota del PRI y un probable triunfo de Andrés Manuel López Obrador en 2018, es un riesgo muy amplio para Peña Nieto y sus aliados (empresarios y políticos) nada más dejar sus cargos y posiciones de poder.
Hasta hoy, hay varias cuestiones que aún no se dilucidan, y que no se sabe si se dilucidarán en un futuro.
1.Odebrecht no fue la única gran empresa que financió la campaña de Enrique Peña Nieto en 2012. Hay más empresas que, seguramente, han recibido en lo que va de sexenio millonarios contratos en sectores que se abrieron a la iniciativa privada, y eso ha sido así porque esas empresas financiaron la campaña de EPN y el PRI.
2. No se sabe cuánta gente está involucrada en esta corrupción. Es decir, sabemos que es la camarilla de EPN, pero no sabemos si además de ellos, quienes integran los partidos que firmaron el Pacto por México también estuvieron al tanto de estos negocios y los apoyaron a cambio de posiciones políticas o cotos de poder.
3. Aunque parece que están peleados, existe una alta probabilidad de que el PRI y el PAN (con sus nuevos aliados, el PRD y MC) se “entiendan”. Ahora se confrontan en el Senado, y el PAN le “pega” a Peña Nieto rumbo a las próximas elecciones. Pero la corrupción, la impunidad y el castigo a quienes han vendido el futuro del país por tantos años, no se castigará porque el PAN y el PRI llegarán a un acuerdo.
4. Por eso, surge la cuestión: ¿cuándo llegarán a ese acuerdo el PAN (aliados) y el PRI sobre el caso Odebrecht?
De lo que deberíamos estar seguros es que, si nuestro país fuera realmente democrático, habría lo siguiente:
1- .Enrique Peña Nieto debería estar en la cárcel y no dirigiendo al país. Los actos de corrupción del sexenio son tan claros y tan burdos que su pena sería muy alta.
2.- No solamente debería estar EPN en la cárcel, sino también los integrantes de los partidos que han sido aliados de él y que han participados en actos de corrupción e impunidad.
Quedan, además, algunas dudas:
1.- ¿Cuánto es el dinero que se pudo haber invertido en salud, educación, cultura, etcétera, y que en lugar de ello se dio a grandes empresarios por el dinero “invertido” en Peña Nieto durante las elecciones de 2012?
2.- ¿Cuántos años de “subdesarrollo” ha significado el actual gobierno de la República y sus aliados para México?
Felipe Báez
26 octubre, 2017 at 9:09 pm
Es un crimen que el cartel que dirige EPN, crimen organizado de estado, se haya desecho del patrimonio de la nación que es el petróleo.
alberto Garcia S
27 octubre, 2017 at 5:47 pm
los Mexicanos tenemos nuestros reflejos atrofiados ya que no reaccionamos con nada por eso esta gran familia de mafiosos que nos controlan
Pablo pavon
31 octubre, 2017 at 3:42 am
lozoya compro a
Agonitrogenados para veneficiar a su amigo a pesar que si 60% de la planta era chatarra