Luego del fatal incendio en la Guardería ABC, ocurrido durante 2009 en Hermosillo, Sonora, el Gobierno de Felipe Calderón aprovechó la situación para hacerse de millones de pesos fuera del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
La periodista Nancy Flores, revela en su investigación para Contralínea que los fondos destinados a ayudar a las víctimas, manejados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), nunca llegaron a las familias de los 49 bebés fallecidos, 104 bebés heridos de gravedad y adultos quemados durante el siniestro.
Flores recuerda cómo el terrible hecho fue ajeno y hostil con las víctimas desde el primer momento, cuando el IMSS impidió que los infantes fueran trasladados a hospitales en Estados Unidos especializados en menores quemados para evitar una cobertura mediática internacional.
Antimonumento por los 49 niños que murieron en el incendio de la Guardería ABC. Foto: Cuartoscuro
También cómo se llevó a cabo una “operación de Estado” para encubrir a la familia de Margarita Zavala, de manera que la Corte no determinara que en el siniestro hubo graves violaciones a derechos humanos ni se manifestara por sancionar a los familiares de Zavala, pues dos de sus primas estaban involucradas en la tragedia.
“Puedo dar fe de una operación de Estado para proteger a la familia de la esposa del presidente, para proteger a los altos funcionarios públicos de ese gobierno que hoy viene a hablar de estado de derecho y de autonomía y de no sé cuántas cosas, sin ninguna autoridad para decirlo”, indicó en febrero pasado el entonces ministro de la Suprema Corte, Arturo Zaldívar.
Lucrar con la tragedia
Pero eso no paró ahí. Las autoridades federales aprovecharon para lucrar con el suceso:
El 27 de julio de 2010, el entonces subsecretario de Egresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Dionisio Arturo Pérez-Jácome Friscione, autorizó al IMSS la entrega de 250 millones de pesos.
La orden del subsecretario indicaba entregar los recursos presupuestarios de ayuda extraordinaria, “para ser aportados por el IMSS para la constitución de un fideicomiso, cuyo fin será cubrir diversos conceptos de apoyo que están contemplados en el ‘Decreto por el que se otorgan ayudas extraordinarias con motivo del incendio ocurrido el 5 de junio de 2009 en la Guardería ABC, sociedad civil, en la ciudad de Hermosillo, Sonora”.
Padres de niños que fallecieron en 2009 en la Guardería ABC, protestando afuera de Palacio Nacional. Foto: César Huerta.
El decreto, firmado por Calderón, “establecía que habría una ayuda extraordinaria para la educación de los menores que resultaron lesionados para los niveles educativos de primaria, secundaria, media superior y superior, en cualquier institución educativa pública o privada en la República Mexicana”.
También se ofrecía ayuda vitalicia por solidaridad a las madres de los menores que fallecieron, a las madres de los menores lesionados, a las maestras y a otros adultos que resultaron lesionados.
Se indicaba ayuda para el pago del consumo de la energía eléctrica que se generara en el domicilio donde residían los menores y adultos lesionados, durante el tiempo que requirieran el uso de equipos para el debido cuidado de la salud, y ayuda para atención médica vitalicia de los padres de los menores fallecidos y lesionados por quemaduras, mediante un Seguro de Salud para la Familia.
Pero nada de esto se cumplió.
Flores relata que el director de Finanzas del IMSS, Eduardo González Pier, envió dos oficios mediante los cuales solicitó a la SHCP, encabezada por José Antonio Meade, un monto de 250 millones de pesos.
Familiares de los niños que murieron durante el incendio de la guardería ABC.
El subsecretario de Egresos ordenó a la Tesofe depositar esa cifra el 20 de julio de 2010 en la cuenta bancaria del IMSS, en el banco Scotiabank Inverlat. También determinó que el límite para la regularización del acuerdo de ministración sería el 26 de noviembre de ese mismo año y se haría con cargo al presupuesto autorizado del ramo “Provisiones Salariales y Económicas”.
El fideicomiso se creó, en Banamex, el 4 de agosto de 2010, con nombre “Fondo para Ayudas Extraordinarias con motivo del incendio de la guardería ABC” y aunque el IMSS recibió los recursos como una bolsa extraordinaria para atender a los afectados, al término del sexenio de Calderón sólo se habían ejercido 9 millones 78 mil 567.95 pesos.
En algunos de sus informes, la SHCP da cuenta del ejercicio de 3 millones 380 mil 921.83 pesos en 2010, y 6 millones 397 mil 646.57 pesos en 2011 y nada en 2012.
Pero además, no todo este recursos fue destinado a ayudar a las víctimas y sus familias: de esos 9 millones de pesos también se pagaron los gastos de administración del fideicomiso y los honorarios de las auditorías de los ejercicios 2010 y 2011.
Así, Flores explica que el fideicomiso sólo sirvió para la especulación financiera: “al cierre del sexenio peñista contaba con una disponibilidad de 334 millones 776 mil 499.39 pesos por los rendimientos generados entre agosto de 2010 y diciembre de 2018”.
Lo anterior se debe a que en el Gobierno de Peña Nieto sólo se ejercieron 22 millones 762 mil 856.75 pesos, que además de las ayudas, implicaba gastos de administración y de auditorías.
AMLO y los apoyos
Ya con la entrada del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien se comprometió a reparar el daño de forma integral, los apoyos han comenzado a entregarse.
Según la SHCP, en 2019 se ejercieron 64 millones 448 mil 939.67 pesos a favor de las víctimas; en 2020 se entregaron 125 millones 316 mil 594.20 pesos; en 2021 por 129 millones 746 mil 612.3 y se le depositaron 12 millones 163 mil 204 pesos y, al tercer trimestre de 2022, se destinaron otros 103 millones 949 mil 072 pesos a las víctimas y se transfirieron 107 millones 312 mil 300 pesos al fideicomiso.
