El destape de Alberto Uribe Camacho para contender por un cargo de elección popular ha puesto a temblar a los emecistas que no viven su mejor momento en la entidad jalisciense.
El ex alcalde de Tlajomulco despertó todo tipo de especulaciones e interés tras presentar su renuncia al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y de acuerdo con los trascendidos que se han vertido en la prensa, se perfila para contender por uno de los dos municipios más importantes del estado: Guadalajara o Zapopan.
Antes de que el canciller Marcelo Ebrard diera a conocer la renuncia de Uribe por medio de su cuenta de Twitter, sostuvo una reunión larga con AMLO, lo que parece ser un indicio de que el tabasqueño estaría de acuerdo en las aspiraciones de Uribe, dado su alejamiento de Carlos Lomelí, cuyas empresas fueron inhabilitadas por el Gobierno Federal para concursar en licitaciones.
De conformidad a las instrucciones del Presidente, Alberto Uribe Camacho presentó su renuncia el sábado a la Dirección General de Coordinación Política por ser de su interés participar en las próximas elecciones en su natal estado de Jalisco. Gracias Alberto y mucho éxito!!!
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) November 3, 2020
Uribe renunció a Movimiento Ciudadano el 8 de febrero del 2018 cuando ya tenía en el bolsillo la promesa de convertirse en el secretario general de Gobierno si Enrique Alfaro Ramírez ganaba la gubernatura, lo cual finalmente ocurrió.
A su lado estuvo Marcelo Ebrard, quien vino a Guadalajara para anunciar públicamente la incorporación de Uribe a Morena, y nombrarlo el coordinador de campaña de AMLO en Jalisco.
Si Uribe se decide por Guadalajara, tendrá que enfrentar a su ex compañero Ismael del Toro, quien busca reelegirse, pero más allá de eso, algunos analistas señalan que el verdadero rival del ex director de la Secretaría de Relaciones Exteriores, sería el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, quien saltó de la capital jalisciense a la gubernatura.
En mayo del 2018, Alberto Uribe calificó a Alfaro Ramírez como un tipo altamente soberbio, y dijo que dejó de apoyarlo porque no confía en su proyecto.
“El único problema que tiene Alfaro verdaderamente serio es que su ego es superior a su soberbia y eso ya es un decir. Su ego es mayor a su soberbia y vaya que su soberbia es gigante, punto. Pensé que tenía más nivel político, pero bueno lo compruebo que no. Él tiene un encono contra mí, yo no tengo nada personal, simple y sencillamente decidí no apoyarlo porque no confío en su proyecto”, sentenció.
