Los tiempos cambiaron en México. ¿Se acuerdan cuando los funcionarios públicos tenían acceso a todo y de forma preferencial?
Pues ahora eso ya no sucede.
La secretaría de gobernación de Andrés Manuel López Obrador, Olga Sánchez Cordero, recibió ayer su primera dosis de vacuna contra el Covid-19, y lo hizo como si fuera cualquier otra persona: realizó la fila, siguió los ejercicios que le pedían que hiciera, esperó, y fue atendía sin influyentismo ni nada de las lamentables prácticas que había en gobiernos pasados.
Antes, cuando los funcionarios siempre recibían todo antes. Es decir, ellos se agandallaban lo que fuera. Que si vacunas. Que si préstamos. Que lo que sea. Ellos siempre eran los primeros y nunca se mezclaban con el pueblo.
Eso ya cambió. Hoy la situación es distinta, y suele ya verse a los altos funcionarios hacer cola como toda la gente, y esperar su turno.
¿Se imaginan a un secretario de gobernación haciendo cola para recibir una vacuna? ¿Se imaginan a un secretario de algo haciendo una fila de algo? Nunca. Siempre los alto funcionarios eran los primeros. Si hubieran sido otros tiempos, a esos altos funcionarios ya se les hubiera vacunado, y hubieran ido a su casa para hacerlo.
Eso ya cambió. Completamente ya cambió.
Aquí las imágenes que circulan de la secretaria de gobernación, en la fila, esperando su turno:
