En una extensa columna para el portal Sin Embargo, el escritor y ensayista Fabricio Mejía Madrid exhibe los contrastes que han caracterizado al ministro de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación (SCJN) Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien se ha convertido en la punta de lanza para frenar la Reforma Judicial, aprobada en el mes de septiembre pasado.
Alcántara Carrancá asumió la investidura de ministro el 17 de diciembre del 2018 ante el Senado de la República, en sustitución de José Ramón Cossío, quien actualmente trabaja como litigante del empresario Claudio X. González Guajardo.
Mejía Madrid consigna que ahí en la Cámara Alta, el ministro pronunció un discurso más cercano al obradorismo, que al paso del tiempo se fue degradando.
“El Estado ya no habla con sus ciudadanos sino que amenaza a sus enemigos. Las sociedades abdican de la libertad cuando se les ofrece mayor seguridad. Son momentos de que los jueces vivan una efeverscencia creativa, intensa, pasional, de energía en pro de otro mundo posible. Reconozco a un país que en este momento vive el dolor por la violencia que se manifiesta en todas formas: en la pobreza, el desplazamiento, en la exclusión, la violencia de género, el feminicidio se normaliza, la desaparición, la crimininalización convierten a las víctimas en centrales, en una búsqueda de justicia, misma que me convoca, misma que me compromete ante ustedes. La corrupción, la impunidad y la pobreza son corrosivas. E impiden la realización de una auténtica justicia y de una paz duradera”, dijo en esa ocasión.
También se mostró preocupado por la calidad humana en el ejercicio de la impartición de justicia, pues aseveró que los juzgadores no pueden apegarse a la literalidad de un texto constitucional.
“Cuando decimos que los jueces debemos nuestra lealtad al orden constitucional y no a una u otra persona o a un grupo de intereses, lo que estamos diciendo en realidad es que nuestro compromiso es con los principios, valores, anhelos, aspiraciones del pueblo, cuya voluntad está plasmada en nuestras normas. Un juez que no pueda ver, al decidir un caso, más que un texto en la norma nunca podrá estar a la altura de las expectativas. Es necesario que vea más allá de la norma o del expediente, que vea la realidad social en la que está operando, que pueda empatizar con el sufrimiento de quienes han sido víctimas de la injusticia, de quienes no tienen los medios para defenderse por sí mismos, para que reciban una justicia que sea algo más que palabras complicadas y fórmulas inatendibles. Un buen juez se encuentra más que en su dominio técnico, en su calidad humana. Es justo esa dimensión, en el caso de ser honrado por ustedes, señoras y señores senadores, estoy dispuesto a adoptar y aportar a nuestra Suprema Corte. Mi idea es de una Suprema Corte, no sólo talentosa, sino ante todo humana, capaz de empatizar con quienes acuden a ella, como diría Gandhi la grandeza de una nación se mide en la forma en que trata a sus miembros más débiles”.
Incluso, recuerda el escritor, el ministro aseguró que estaba dispuesto a reducir su salario para no ganar más que el Presidente de la República.
“La función de ministro de la Suprema Corte es tan honrosa que no me importaría ganar menos que el Presidente”, dijo Alcántara al rendir protesta.
Sin embargo, cuando la Suprema Corte se amparó para que sus integrantes siguieran ganando sus 5 millones al año y sus seguros médicos de 12 millones, el ministro guardó silencio.
“No se acordó de los más débiles cuando amparó a Cabeza de Vaca, el gober narco de Tamaulipas. Lo de la lealtad que no es con grupos de intereses, se le pasó al ministro Alcántara cuando prestó su propia mansión para que ahí se reunieran, el 12 de diciembre de 2023, ya echado a andar el proceso electoral, los jueces electorales federales con el dirigente nacional del PRI, Alito Moreno, y con un alto coordinador de la campaña de Xóchitl, Santiago Creel”, señala el escritor.
Todo esto, dice Mejía Madrid, terminó por extraviar al ministro, quien ha llegado al extremo de considerar el triunfo de Claudia Sheinbaum como “una rebelión o una usurpación del poder”, pues se trata de un gobierno que va en contra de los principios de la Constitución.
“Este abogado al que le temblaban las manos cuando se refería al pueblo, piensa que la elección de 36 millones de votos en 277 distritos de los 300 que hay, es una rebelión que le quita su libertad al pueblo. Piensa que está viviendo en una dictadura y que él, el ministro, se pone por encima de los otros dos poderes, Ejecutivo y legislativo, para salvar la democracia, la república, y la Constitución. Es una especie de Lorenzo Córdoba, de José Woldenberg, de Beatriz Pagés, pero con verborrea”, menciona el escritor.
Como una evidencia de lo anterior, Mejía Madrid ofrece un fragmento de declaraciones hechas por el ministro.
“Si se instaurara una monarquía, un gobierno confesional o un Estado centralista– no hablaríamos de una reforma a la Constitución, sino de una nueva Constitución. Y una nueva Constitución solamente podría ser aprobada por el Poder Constituyente”.
El escritor interpreta esto como una confesión de parte del ministro, quien cree que la elección del 2 de junio fue una imposición que le quitó libertad a los mexicanos y que “también cree que el nuevo derecho aprobado por dos terceras partes del Congreso y la más de la mitad de los estados de la República, es equivalente a que se hubiera declarado un Estado monárquico, centralista y confesional. Hay una Reina Claudia I, como decía Enrique Krauze. Hay una teocracia quizás inspirada en el culto al Cabecita de Algodón. Hay un centralismo que impide que la violencia se despliegue con libertad en todo Guanajuato”, menciona Mejía Madrid.
Pero el tema central, expone el autor, es la manera en la que el ministro ha tratado de declarar inconstitucional a la propia Constitución, bajo el argumento de que existen “artículos de primera y de segunda” que sí pueden ser revisados por la SCJN. Aquí, dice el escritor, es donde el ministro se ha puesto “creativo, intenso y pasional”.
Álcantara considera que ciertas normas de la Constitución Federal pueden ser calificadas como “leyes electorales federales”, para efectos de la procedencia de las acciones de inconstitucionalidad en su contra”.
“Aquí vale la pena hacer un alto. Cuando el PRIAN y PRD con Peña Nieto aprobaron la privatización del petróleo y el PT quiso ampararse, la Suprema Corte dijo que el artículo 61 de la Ley de Amparo lo prohibía. La Constitución no es impugnable. Perfecto. Pero, ahora que es para que se nos dé el derecho a elegir jueces, resulta que, en realidad, la Constitución ya no es la Constitución, sino unas leyes ahí todas guangas que habría que revisar y declarar inconstitucionales. Ese es el razonamiento del proyecto de sentencia de Alcántara Carrancá”, señala el escritor.
Finalmente, menciona que la interpretación de las leyes incluye el conocimiento de las mismas o el intento de canalizar la voluntad de quien las redacta, algo que también ocurre con la literatura, sólo que ésta no tiene “terribles consecuencias”.
“El problema con los legales es que tienen consecuencias para las personas, las víctimas, sus familiares. Lo bueno de la literatura es que no tiene esas terribles consecuencias. Por eso, lo que necesitamos son abogados hábiles pero jueces justos. Es decir, los abogados que te sacan de una bronca. Pero los jueces que vean por el interés general, por la Patria, y por el pueblo. Tal como, alguna vez, el ministro Alcántara Carrancá se comprometió”.
Sergio Ávila
3 noviembre, 2024 at 10:30 am
Plan C vaaaaaaa y los corruptos del cartel de la toga se vannnnn
Rebeca de la Cueva
3 noviembre, 2024 at 10:54 am
De inteligentes es reconocer que te equivocaste, yo perteneci a Morena ahora hasta asco siento, vi como personas que si querían ayudar al Pueblo fueron puestas a un lado y entraron los mismos corruptos con la venía de ese partidos, esta em su derecho de hacer hasta lo imposible para frenar la destrucción de la Constitución y poner en su lugar una a modo, les pondré un ejemplo, ya van a poner tiendas del bienestar al rato se entregaran tarjetas para tener derecho al alimento que ellos quieran como frijoles con gorupos, así trabajo el Maduro en Venezuela y de tener excelentes tiendas con todo lo necesario acabaron comprando basura por hambre. CLARO QUE SE TIENE QUE FRENAR
Jorge GM
4 noviembre, 2024 at 8:06 am
Es absurdo ese ejemplo, una reforma constitucional (avalada y confirmada de manera totalmente legal) no es igual a una tienda de Bienestar, NADA que ver.
Y el pensar que el colocar tiendas de Bienestar sera igual a Venezuela en vender productos de baja calidad,no es así, es solo una opción más para comprar la canasta básica, a diferencia de Venezuela, en México Sí hay variedad de opciones, además de libertades.
Así que NO seas mentirosa Rebeca De La Cueva, tú NO votaste por Morena, sólo eres un Bot más de los “muchos” que no fueron a votar en 2 de Junio, y si no eres un Bot, tantito peor que no te informes de la clase de gente malevola que son algunos jueces.
Guadalupe Velasco
4 noviembre, 2024 at 11:39 am
Así se expresaban del proyecto anterior y, hoy ante las evidencias, deberían cerrar la boca
Herny
3 noviembre, 2024 at 11:30 am
No es que aya simulado ser Obradorista, el que es corrupto no deja de serlo, y pues no es de confianza ni para el mismo, así como engaño al ejecutivo anterior, engañara a cualesquiera, si único objetivo es el dinero
Guadalupe Velasco
4 noviembre, 2024 at 11:41 am
Ese es el meollo del hoyo
Israel Jarquín
3 noviembre, 2024 at 1:22 pm
No cabe duda; ese miserable ministro es hipócrita, traidor, cínico, ANTIPUEBLO, corrupto, zángano, vividor, mafioso, es un hijo de pta. A su edad, debería hacer algo por el pueblo, pero no, todo lo contrario, lo que lo mueve es el poder económico, los privilegios equivalentes a los de un rey… al final, la historia lo juzgará..!
Roberto Gsrcia
3 noviembre, 2024 at 2:23 pm
Rebeca en la forma que habla demuestra que es una fifi.
Jorge Bustamante
3 noviembre, 2024 at 7:58 pm
Pena de muerte para Norma Rapiña y los otros 7 ministros corruptos fifis….
Víctor Zamora Rosales
3 noviembre, 2024 at 8:53 pm
No hay problema, ahora que el pueblo bote a la chin·$%$·gada a los ministros el tal Carrancá se puede ir a trabajar con alguno de los más ricos del país.
De esos que tanto odian a los mexicanos.
Javier Ochoa
3 noviembre, 2024 at 8:54 pm
Creo que este señor si tuviera un poco de vergüenza no estaría en contra de un gobierno que solo busca la justicia y erradicar la pobreza,no es justo que quieran hacer las cosas a su modo y conveniencia,yo creería más si apoyarán,esos son las gentes que requiere el país…
Rebeca Cuevas
3 noviembre, 2024 at 11:47 pm
Es impactante ver lo q declaro en el senado y lo q ha hecho, vergüenza le debía dar que por su ambición, diga tantas mentiras sea un hipocrita e incongruente. Pin… viejo no merece respeto.
Guadalupe Velasco
4 noviembre, 2024 at 11:45 am
Mi opinión es que la pena de muerte no aplica por no figurar en nuestra constitución, pero si la exhibición pública, aunque después quisieran borrar su vergüenza amparándose el los derechos humanos.
Herny
4 noviembre, 2024 at 12:54 pm
Pues lo poco que yo conozco de Venezuela es como cualesquier lugar turístico de Mexico, claro que tiene su cinturón de pobreza, y es lo que se busca reducir en México, solo que los fifis se oponen
antonio
4 noviembre, 2024 at 1:34 pm
Carranca, le llegaron al precio, y no Hiba a desperdiciar el negocio de su vida, todos y dije todos desde los ministros hasta los sacacopias, son corruptos, y al servicio nunca se la ley y. La razón, siempre a quien les llege al precio
Armando
4 noviembre, 2024 at 6:55 pm
Carranca es un traidor por qué el que lo puso como ministro fue AMLO pero como dicen mordió la mano del que le dio de comer pero aunque den sus patadas de ahogado la limpia en el poder judicial va por qué va y nada ni nadie la van a detener aunque se mueran de coraje los del prianmc, los chayoteros desinformadores, empleados del poder judicial y demás parásitos y mafiosos
Bertha Angélica Orozco
5 noviembre, 2024 at 8:50 am
FUE ERROR DEL PRESIDENTE PROPONERLO Y DEL SENADO CON MAYORÍA MORENISTA APROBARLO, ES OBVIO EN SU DISCURSO INICIAL QUE ANTEPONÍA SU CRITERIO A LA CONSTITUCIÓN Y AHORA LO RATIFICA PERO EN SENTIDO CONTRARIO, SI MORENA PENSÓ QUE INTERPRETARÍA LA CPEUM PERO PARA BENEFICIAR AL PUEBLO SE EQUIVOCÓ. SUS INTENCIONES SIEMPRE FUERON CLARAS, AHI ESTUVIERON, NUNCA MINTIÓ, FUE MORENA QUIEN NO LO SUPO LEER. HABRIA QUE SER MAS CUIDADOSO AL ELEGIR FUNCIONARIOS CON UN VERDADERO PERFIL SOCIAL.