La constructora Odebrecht financió ilegalmente con 3 millones 140 mil dólares (40 millones de pesos), la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012, a través de transferencias bancarias a una empresa en Islas Vírgenes, ligada a Emilio Lozoya Austin, en ese entonces coordinador de Vinculación Internacional en la campaña del candidato priista.
De acuerdo con Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), el dinero fue enviado en plena campaña presidencial, mediante siete transferencias a la cuenta de Latin American Asia Capital Holding -vinculada a Lozoya Austin- a través de la cuenta 244006 del Meinl Bank de Antigua, a nombre de la compañía ‘fachada’ Innovation Research Engineering and Development Ltd. (IRED), utilizada por Odebrecht para sobornar a políticos latinoamericanos.
A través de esa misma cuenta, entre octubre de 2010 y febrero de 2011, fueron transferidos casi un millón de dólares a una compañía fantasma de Poza Rica, Veracruz, denominada Blunderbuss Company SA de CV, ligada al ex gobernador priista Javier Duarte.
Ayer el diario brasileño O’Globo y El Quinto Elemento Lab, revelaron que el ex director de Odebrecht en México, Luis Alberto Meneses Weyll, se reunió en marzo de 2012 con Emilio Lozoya y en ese encuentro el integrante de la campaña presidencial de Peña Nieto, le solicitó 5 millones de dólares como pago por haber ayudado a que la empresa asentara su base de operaciones en Veracruz.
Ante esta situación, la empresa Odebrecht aceptó pagarle el soborno por 4 millones de dólares y según su ex director, lo hizo porque Lozoya ya se perfilaba como un influyente funcionario en el próximo gobierno a cargo de Peña Nieto.
“A principios de 2012, constaté que Emilio Lozoya había alcanzado una posición destacada en el PRI, que disputaba las elecciones presidenciales de julio de 2012, cuyo candidato era el favorito en las encuestas electorales. Lozoya se había convertido en uno de los líderes del comité de campaña, por lo que probablemente se convertiría en una persona influyente en la administración pública del país”, declaró Weyll a los fiscales brasileños, según el diario O’Globo.
Poco antes de asumir el cargo de Presidente, en noviembre de 2012, Peña Nieto se reunió con Marcelo Odebrecht, según una serie de de correos electrónicos que fueron interceptados por la Policía Federal de Brasil, a los que tuvo acceso MCCI.
Tras obtener la Presidencia de México, Enrique Peña Nieto designó a Emilio Lozoya Austin como director de Pemex y desde ese cargo, negoció otros 6 millones de dólares en sobornos, a cambio de obras de la empresa Odebrecht en Tula.
El dinero entregado a Lozoya provino de la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht, mejor conocido como el “departamento de sobornos”, a través del cual se financiaron campañas políticas en El Salvador, Venezuela, Brasil, República Dominicana, Panamá, Colombia y Perú.
De acuerdo con Eduardo Cunha, presidente de Odebrecht Ambiental, la empresa brasileña actuaba en un sin número de países, estados y ciudades mediante diversos negocios y ejecutivos, con el fin de estar más cerca de los políticos, los candidatos y sus campañas.
“Las donaciones se distorsionaron y pasaron a ser vistas por la empresa como una forma de participación del proceso electoral, como forma de promover candidatos cuyas plataformas se acercaban a nuestros intereses en el sector de la construcción y como forma de “protección”, especialmente en los negocios de inversión” según aceptó Cunha.
luis hernández romero
14 agosto, 2017 at 3:08 pm
Estimados redactores de Polemon:
Anta la irreparable perdida de ese gran periodista Jaime Aviles, solo quedan ustedes como herederos legitimos de Jaime. se muy bien que seguiran la línea honesta, honrada, critica, de izquierda, irreverente y lúdics que caracterizó erl trabajo del amigo Jaime
Mis condolencias y mis votos para que sigan trabajando con el entuciasmo y el compromiso de Jaime.
luis hernández romero