Una omisión de la Procuraduría General de la República (PGR) en la integración de la investigación deja abierta la posibilidad de que el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, salga de la cárcel y enfrente su juicio en libertad.
Después de que se terminara el plazo de un año que un juez federal dio para investigarlo, la PGR acusó a Duarte de lavado de dinero y asociación delictuosa, pidió que se abra el juicio en su contra pero omitió formularle el cargo de delincuencia organizada, el único delito que lo mantiene en prisión preventiva automática.
Esta decisión permite a los abogados solicitar en una futura audiencia que el juez retire la medida de prisión preventiva y Duarte enfrente el juicio en libertad. Con lo cual, sería el juzgador quien decida si el ex gobernador queda libre o no, tomando en consideración el riesgo de que al quedar libre, el político veracruzano pueda fugarse.
Enrique Peña Nieto, Emilio Lozoya Austin y Javier Duarte. Foto: Especial
Según el artículo 19 de la Constitución, los jueces deberán dictar la medida de prisión preventiva oficiosa, la cual es automática, cuando una persona comete el delito de delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos.
En un principio, la PGR había imputado a Duarte el delito de lavado de dinero, por el cual consiguió que se le vinculara a proceso. Asimismo, lo había acusado de delincuencia organizada, sin embargo fue reclasificado por el de asociación delictuosa, un delito por el que podría alcanzar los 10 años de prisión pero no se encuentra en la lista de los que ameritan una prisión inicial automática.
Aunque al retirarle este cargo Duarte tiene posibilidades de quedar libre, esto no significa que lo pueda hacer de inmediato, pues en la audiencia inicial el juez Gerardo Moreno determinó que el ex gobernador de Veracruz ameritaba prisión preventiva “justificada” al ser una persona con los medios para escapar de la justicia.
Javier Duarte con Enrique Peña Nieto. Foto: Especial
Otro de los obstáculos que enfrenta Duarte para recobrar su libertad es la orden de aprehensión dictada en su contra por un juez de la Ciudad de México por los delitos de corrupción que le imputa la Fiscalía de Veracruz, por los cuales se le iniciaron dos procesos que continúan abiertos y en la fase de investigación complementaria.
En su investigación inicial, la PGR indicó tener pruebas de que Javier Duarte logró desviar y lavar dinero por al menos 400 millones de pesos del erario público de Veracruz, mediante una red de prestanombres y empresas fantasmas. Los recursos habrían sido utilizados en gastos personales y en la compra de múltiples propiedades.
Con información de Animal Político
Felipe Báez
22 agosto, 2018 at 12:58 pm
El caso de Javidu, apunta como ruta de investigación a EPN; Por el dinero enviado desde Ver. pra la campaña de EPN, así como el caso de Odebrecht.