No es que sorprenda que así sea, lo que sorprende es que ha sido así de forma muy clara: la campaña ha girado en torno a varios actores políticos, y ninguno es la oposición. Se ha hablado del Instituto Nacional Electoral (INE), de Morena, de Andrés Manuel López Obrador, de Mario Delgado y de Félix Salgado Macedonio.
¿Y el PAN? ¿Y el PRD? ¿Y el PRI? Nada.
Quizás se habló un poco de un actor político distinto )Silvano Aureoles), pero porque empujó a un ciudadano.
La oposición está desaparecida. No existe. No tiene proyecto de nación. No tiene agenda para el Congreso. No tiene propuestas. No tiene liderazgos. No tiene nada interesante para decir. No tiene calidad moral. No tiene ideología. Es ataque ataque ataque. Y es ataque invisible, porque nadie los pela.
Las campañas giran entorno a Morena. Y a AMLO. La oposición, como desde hace casi 3 años, simplemente no existe. Y cuando existe, es para hacer el ridículo.