Tras la alerta sanitaria por el brote de Infección del Torrente Sanguíneo (ITS) causado por la bacteria Klebsiella oxytoca, la Secretaría de Salud del Estado de México informó que la situación está bajo control.
No se han detectado nuevos contagios, y las acciones preventivas continúan en toda la red hospitalaria estatal, tanto pública como privada.
La titular de la dependencia, Macarena Montoya Olvera, destacó que el brote, identificado en tres hospitales públicos y uno privado, fue contenido gracias a la implementación inmediata de medidas sanitarias, como la capacitación de más de 3 mil trabajadores en higiene de manos, protocolos de ingreso a cuidados intensivos y desinfección de áreas críticas.
Acción inmediata y apoyo a familias
En respuesta al brote, se reforzaron los protocolos en las Unidades Médicas y se mantuvo una coordinación permanente con la Secretaría de Salud Federal. Todo caso sospechoso es analizado por el Laboratorio Estatal de Salud Pública (LESP) y el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE).
Respecto a los fallecimientos vinculados al brote, Montoya Olvera precisó que ocho han sido confirmados como positivos a Klebsiella oxytoca, uno descartado y cuatro están en proceso de análisis. Subrayó que los pacientes afectados presentaban comorbilidades graves que complicaron su recuperación.
Además, se brinda apoyo psicoemocional a las familias de los pacientes afectados, como parte del compromiso de la Secretaría de Salud con quienes han enfrentado esta situación.
La titular de Salud estatal subrayó que la rápida acción preventiva y el monitoreo constante han sido factores clave para contener el brote. Asimismo, aseguró que la entidad cuenta con los medicamentos e insumos necesarios en caso de cualquier eventualidad.
“No se han reportado nuevos casos y seguimos trabajando para garantizar la salud de la población. Es importante informarse a través de fuentes oficiales y evitar caer en desinformación”, señaló Montoya Olvera.
El brote de Klebsiella oxytoca, detectado en su momento en cuatro hospitales, es ahora un ejemplo de cómo una reacción coordinada y efectiva puede marcar la diferencia en la contención de riesgos sanitarios. La salud pública es una prioridad que requiere la cooperación de todos para mantener seguros a los mexiquenses.
