La ex titular de la Sedesol y la Sedatu, Rosario Robles Berlanga, entregó a la Fiscalía General de la República (FGR) una nueva propuesta de salida anticipada del juicio en su contra por la llamada “Estafa Maestra”, en la que ofrece declararse culpable y cumplir una sentencia de seis años en prisión.
Esta propuesta fue hecha para no llegar a a juicio ni que se le exija la reparación del daño por 5 mil 73 millones de pesos.
Robles ya había hecho antes una propuesta en la que aceptó declararse culpable y recibir una pena de tres años en prisión, pero no fue aceptada por la FGR.
A la ex funcionaria se le acusa de dos veces el delito de ejercicio ilegal del servicio público, por no haber evitado ni denunciado el desvío de los citados 5 mil 73 millones de pesos de erario federal durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto.
El ejercicio ilegal del servicio público es un delito que se pena con hasta siete años de prisión.
No obstante, la FGR pidió originalmente al juez que le imponga a Robles una pena de 21 años en la cárcel, siete años or cada uno de los delitos de ejercicio ilegal del servicio, y siete más al considerar que hubo acciones que agravan la penalidad.
En particular, hizo referencia a que se trata de un delito continuado, es decir, que lo cometió en Sedesol como un mecanismo de administración pública y lo replicó en la Sedatu, en ambos casos con un claro propósito de generar un quebranto al erario federal.
El viernes pasado, durante lo que sería la audiencia intermedia, el juez Ganther Alejandro Villar Ceballos, concedió un nuevo plazo de 30 días -que vence el próximo 26 de marzo- para que Robles y la FGR negocien una posible salida anticipada al caso.
Ahí, Robles acusó discriminación y maltrato por parte de la FGR y dijo que la dependencia federal no ha accedido a una negociación, pues ni siquiera el personal ministerial la ha visitado en el penal de Santa Marta Acatitla, donde está detenida, para cerrar un acuerdo.
Agregó que ella busca una salida anticipada, incluso a riesgo de declararse culpable, pues cada día que pasa en el penal “está muriendo en vida”.
“Por la afectación económica, familiar y de salud, porque cada día que paso en Santa Martha yo me estoy muriendo, quería abreviar este proceso, pedir el mismo trato que se le ha dado a otros, no pido un privilegio, todo el tiempo he hablado de cancha pareja y no la he tenido, y eso es lo que quiero que quede muy claro”, declaró.
Una vez que la nueva propuesta sea entregada, la FGR debe decidir, antes del 26 de marzo, si acepta o no esta propuesta, o en su caso, si hace una contrapropuesta con algunas modificaciones.
De cualquier manera, Robles no saldría en lo inmediato de prisión, donde ingresó en agosto de 2019, es decir, hace un año y siete meses.
